Mario Ibarra Monroy, es uno de los afectados por el nuevo modelo de salud que cobija a los afiliados a la Federación Colombiana de Educadores desde el 1 de mayo.
Una verdadera lucha por salvarle la vida afronta la familia del reconocido periodista y educador samario, Mario Ibarra Monroy, afiliado a Federación Colombiana de Educadores (Fedcode) que quedó por fuera del nuevo modelo de salud que ampara a los docentes, y que se implementó desde el pasado 1 de mayo.
Si bien es cierto que, este fue creado para mejorar la prestación del servicio para 818.960 maestros y beneficiarios afiliados al sistema de salud del Magisterio, ya son muchos los casos negativos que han sido denunciados públicamente tras la afectación presentada en el proceso de transición hacia Fiduprevisora.
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El de Ibarra Monroy se presenta en el municipio de Ciénaga, Magdalena, en donde, debido a la cancelación del contrato con la Clínica General del Norte, le fueron suspendidos los servicios y suministros de medicamentos quedando desprotegido de los servicios médicos vitales para mantenerlo con vida tras más de tres años de haber padecido un Accidente Cerebro Vascular (ACV), con dos
episodios de infarto, en estado crítico, con alto grado demorbimortalidad, que lo tiene en una cama ya que perdió por completo la movilidad.
La improvisación en la transición hacia Fiduprevisora puede causarle daños irreparables al connotado periodista.
Cansada de buscar respuesta en la General del Norte y sin obtener noticias positivas su esposa, Luzmira Flórez Martínez optó por instaurar tutela por negligencia médica ante un despacho judicial; asegura que, “todo ha sido en vano”.
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Recientemente, Flórez Martínez solicitó mediante escrito, se decreten medidas cautelares de urgencia con carácter de previas dentro del proceso de acción de tutela para que se le garanticen sus derechos a la vida.
“Solicitamos que mientras esté el proceso de acción de tutela mi compañero permanente Mario de Jesús Ibarra Monroy, no quede desprotegido de los servicios médicos de la Clínica General del Norte sede Ciénaga, debido a sus complejas patologías clínicas y al riesgo de morbimortalidad latente. Así mismo, se le sigan suministrando los insumos hospitalarios los cuales son de vital importancia para su supervivencia y atención integral que él requiere, ya que es un paciente crónico-paliativo; y se le siga haciendo entrega de los medicamentos para sus enfermedades crónicas y paliativas”, dijo la compañera permanente de Ibarra Monroy.
