En un giro inesperado, las cámaras de seguridad de una empresa de vigilancia arrojaron luz sobre un turbio asunto, funcionarios de la Secretaría de Movilidad podrían estar involucrados en el robo de varias motocicletas y un carro que se encontraban en los patios de tránsito.
El problema se desencadenó después de que cuatro motocicletas y un vehículo fueran reportados como desaparecidos o robados de los patios de inmovilización.
Los encargados de vigilancia de la empresa Vivac asumieron la investigación y, asombrosamente, sus pesquisas los llevaron a poner bajo sospecha al director administrativo de la Secretaría de Movilidad.
Un clip grabado por las cámaras de seguridad mostró a Franklin Carreño, el director administrativo, realizando un acto sospechoso, aparentemente, tomó uno de los vehículos y salió de manera irregular de los patios. Esto ha desatado un escándalo que pone en jaque la confianza de los dueños de los vehículos afectados, quienes demandan respuestas sobre el destino de sus propiedades.
La empresa Vivac emitió un comunicado reciente en el que alega que el líder administrativo de la oficina de Movilidad habría sustraído las motos sin la debida autorización y habría instruido a los vigilantes a no registrar esta acción en el registro correspondiente. Este consejo fue ignorado por los vigilantes, quienes registraron la acción.
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Según el comunicado oficial, sin una orden formal de salida que respalde su decisión, Carreño sacó una de las motocicletas de las instalaciones. Esto fue corroborado por el Sistema de Información Vivac, cuya Central de Monitoreo documentó los hechos. El vigilante de turno detalló que Carreño autorizó verbalmente la salida de tres motos sin una orden, y el guarda, desobedeciendo la instrucción, registró la acción. Posteriormente, a las 11:48 am, Carreño decidió autorizar oficialmente la salida de las motocicletas.
El comunicado revela además que los guardias informaron a los superiores que el director de Movilidad no se había comunicado con ellos sobre el tema y que no asumían responsabilidad, ya que las motocicletas se retiraron sin la debida orden a través del sistema de la Secretaría de Movilidad ni tampoco por instrucción de Ernesto Castro, jefe de Movilidad.
Curiosamente, esta notificación de la empresa de vigilancia, con fecha del 27 de junio, salió a la luz dos meses después. Esto se debió a que Josorit Arrieta, propietaria de uno de los vehículos, descubrió que su vehículo había desaparecido. El vehículo había sido inmovilizado hace cuatro años por un mal estacionamiento, y su repentina desaparición ha añadido un nuevo giro a este misterioso caso.
