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Sálvese quien pueda: en Santa Marta hay peatones que ‘se pasan de piña’

Un ciudadano arriesga su vida y la de su perro al atravesar la peligrosa y transitada Troncal del Caribe, a pocos metros de un puente peatonal cerca de Cootransmag. En la misma imagen también quedó captada la imprudencia de los ciclistas, que tienen la ciclobanda al lado y no la usan.

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Más de 1.273 peatones han muerto y más de 3.635 han sufrido lesiones en lo corrido del 2023 en Colombia.

 Ni quienes transitan a pie se salvan de tener poca cultura en las calles y avenidas principales de Santa Marta, donde más de 23 personas han muerto en 2023 a corte del mes 9 según las cifras de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, Ansv.

El peatón es el actor vial más vulnerable. Tiene prioridad en la vía. Sin embargo, comete acciones osadas que lo ponen en riesgo, como por ejemplo, hacer cruces indebidos. También hay que mencionar que en la capital del Magdalena la invasión del espacio público es una problemática que afecta a los caminantes, quienes deben bajarse en muchas ocasiones de la acera porque no tienen por donde pasar.

Muchos de los accidentes de tránsito se registran por culpa de los peatones imprudentes, que en cuestión de segundos por una mala decisión ponen en peligro su integridad y las de los demás. El ejemplo más claro está en la carretera Troncal del Caribe, donde no miden los riesgos y hacen caso omiso de las normas.


En la edición especial de EL INFORMADOR ‘Sálvese quien pueda’ hoy el turno es para los transeúntes, quienes también deben mejorar sus conductas para tener desplazamientos más seguros en las calles de la capital del Magdalena. A continuación, algunos de los malos hábitos más reincidentes de los peatones:


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No usan las cebras:

Los ciudadanos tienen sus zonas destinadas para cruzar las calles, sobre todo en los semáforos, pero en muchas ocasiones, prefieren hacerlo por las zonas más riesgosas, exponiéndose a ser atropellados por otros vehículos.

No respetan los semáforos

Algunas personas irrespetan las señales de tránsito y no esperan a que el semáforo peatonal esté en verde antes de cruzar.

No utilizan los puentes peatonales

Cruzar por las carreteras nacionales es una de las peores decisiones de los peatones. Lo paradójico es que hay quienes ‘desafían al diablo’ teniendo el puente peatonal a pocos metros. Esto es común cerca del Terminal de Transporte, en la Vía Alterna, en la Troncal vía a Gaira, entre otras vías principales por las que los vehículos transitan a altas velocidades y el riesgo incrementa por las noches.

No usan los paraderos

Quienes van como usuarios en los buses o taxis suelen pedir la parada en cualquier lugar, y con el beneplácito del conductor, se bajan en plena carretera y sin mirar si vienen motos o bicicletas detrás.


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El peligro de los polizones

En la Vía Alterna al Puerto o en la Troncal del Caribe decenas de personas ponen en riesgo su vida diariamente al subirse de forma irregular y sin ningún tipo de protección sobre las tractomulas. Esta atrevida maniobra suele verse en los resaltos, donde los conductores de vehículos pesados por lo general deben bajar la velocidad, y algunas veces son víctimas de atracos. Esta acción es una de las causas comunes de muertes de peatones en Santa Marta.



La cebra está disponible, visible, y hay semáforo con temporizador, pero un ciudadano prefiere atravesar la avenida Santa Rita por donde hay mayor peligro.



Afanado y con incomodidad por los elementos que sostiene, un peatón se mete por la doble calzada a la altura del barrio Santa Ana.
Afanado y con incomodidad por los elementos que sostiene, un peatón se mete por la doble calzada a la altura del barrio Santa Ana.


Normas

Según el Capítulo II, artículos 57 y 58 del Código Nacional de Tránsito, Ley 769 del 2002, la circulación de peatones por las vías públicas se hará por fuera de las zonas destinadas al tránsito de vehículos. Cuando un peatón requiera cruzar una vía vehicular, lo hará respetando las señales de tránsito y cerciorándose de que no existe peligro para hacerlo.

Los peatones no pueden:

- Invadir la zona destinada al tránsito de vehículos, ni transitar en esta en patines, monopatines, patinetas o similares.

-Llevar, sin las debidas precauciones, elementos que puedan obstaculizar o afectar el tránsito.

-Cruzar por sitios no permitidos o transitar sobre el guardavías del ferrocarril.

-Ubicarse delante o detrás de un vehículo que tenga el motor encendido.

-Remolcarse de vehículos en movimiento. Actuar de manera que ponga en peligro su integridad física.

-Cruzar la vía atravesando el tráfico vehicular en lugares en donde existen pasos peatonales.

-Ocupar la zona de seguridad y protección de la vía férrea, la cual se establece a una distancia no menor de doce (12) metros a lado y lado del eje del espacio férreo.

-Subirse o bajarse de los vehículos, estando estos en movimiento, cualquiera que sea la operación o maniobra que estén realizando.

-Transitar por los túneles, puentes y viaductos de las vías férreas.

De acuerdo con el Código de Tránsito, los peatones que queden incursos en las anteriores prohibiciones se harán acreedores a una multa de un salario mínimo legal diario vigente, sin perjuicio de las demás acciones de carácter civil, penal y de Policía que se deriven de su responsabilidad y conducta.


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