A raíz de una reciente declaración del Vaticano sobre la dignidad humana, los obispos católicos de Inglaterra y Gales publicaron el miércoles una reflexión pastoral en la que condenan la transexualidad médica y social, al tiempo que animaron a dar una respuesta "sensible".
Recientemente, el Dicasterio para la Doctrina de la Fe se pronunció enérgicamente contra la ideología de género, afirmando que "debe rechazarse todo intento de ocultar la referencia a la evidente diferencia sexual entre hombres y mujeres".
Los obispos católicos de Inglaterra y Gales siguieron el ejemplo del Vaticano en su declaración del 24 de abril: Intricately Woven by the Lord (Íntimamente entrelazados por el Señor), que animaba a enraizar la atención pastoral en la "aceptación... del cuerpo tal como ha sido creado".
“No podemos alentar ni apoyar intervenciones médicas reconstructivas o farmacológicas que dañen el cuerpo”, escriben. “Tampoco podemos legitimar o sostener un modo de vida que no sea respetuoso con la verdad y la vocación de cada hombre y cada mujer, llamados a vivir según el plan divino”, añaden.
“Más bien —continúan los obispos—, cuando una familia o una persona que experimenta estos retos busca ser acompañada en su camino cristiano, nuestro objetivo es ayudarles a redescubrir y apreciar su humanidad tal como fue concebida y creada por Dios, en cuerpo y alma”.
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En la declaración, los prelados se dirigen específicamente a “los miembros adultos de nuestras comunidades católicas que han optado por la transición social y médica”.
“Siguen siendo nuestros hermanos y hermanas”, afirman los obispos. “No podemos ser indiferentes a su lucha y al camino que hayan elegido. Las puertas de la Iglesia están abiertas para ustedes, y deberían encontrar, por parte de todos los miembros de la Iglesia, una acogida compasiva, sensible y respetuosa”, manifiestan.
Según un censo de 2021 (publicado en 2023), el 0,5% de los residentes ingleses y galeses (262.000) mayores de 16 años se identificaban como transexuales.
Se calcula que 300.000 jóvenes en Estados Unidos se identifican como transgénero, y casi una de cada cinco personas que se identifican como transgénero tiene entre 13 y 17 años, según un estudio de 2022 del Williams Institute.
La “transición de género” en niños
Los obispos también abordan la controvertida cuestión de la transición médica en menores de edad, ya que Inglaterra prohibió los bloqueadores de la pubertad para menores en marzo de este año por motivos de seguridad; mientras que en Escocia los cambios de sexo y los bloqueadores de la pubertad se "pausaron" recientemente.
“No se debe apoyar la intervención médica en los niños”, prosiguen los obispos. "La 'transición' social puede tener un efecto formativo en el desarrollo del niño, y esto debe evitarse con los niños pequeños", remarcan.
De acuerdo a un estudio reciente de la Clínica Mayo, los bloqueadores de la pubertad pueden causar "daños irreversibles", en particular a los niños pequeños.
En 2022, otro estudio acaparó la atención en Estados Unidos, tras constatar que someter a los niños a bloqueadores de la pubertad causa daños irreversibles en la densidad ósea.
Los obispos recuerdan que “cada persona es un misterio, para sí misma y para los demás, pero no para Dios, que nos creó en secreto”.
"El acompañamiento pastoral debe fluir de una aceptación y celebración del cuerpo como creación, del respeto a los padres como primeros educadores, y mantener las mejores prácticas en términos de principios de salvaguarda", continúan los prelados.
Por ello, hacen hincapié en el "discernimiento" y las "relaciones seguras" en el proceso de acompañamiento.
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"Quienes ofrecen un acompañamiento pastoral particular a las personas con disforia de género necesitan una comprensión clara de la visión y comprensión católicas de la persona humana y una visión holística de la sexualidad humana", explican los obispos. "Su trabajo debe ayudar a los jóvenes 'a discernir cómo Dios les llama a encontrar la verdadera felicidad'", añaden.
"Esta formación y competencia son vitales para asegurar que los testimonios y experiencias vividas de quienes luchan con la identidad de género puedan ser adecuadamente comprendidos y respondidos de una manera que honre su percepción de la realidad, particularmente cuando es dolorosa", continúa la declaración.
"Al mismo tiempo, somos alentados por el Papa Francisco a acompañar a otros a una apropiación completa del misterio de nuestra naturaleza humana”, concluye el documento de los obispos.