“No podemos con las orejas y buscamos aretes”

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Escrito por:

Jesús Iguarán Iguarán

Jesús Iguarán Iguarán

Columna: Opinión

e-mail: jaiisijuana@hotmail.com


No es la primera vez que los Estados Unidos retiran sus tropas del continente asiático, en 1973 después de más de diez años de permanencia y conflicto bélico se retiraron de Vietnam, aquel 29 de marzo se celebró en Saigón la ceremonia de retirada de la bandera estadounidense como símbolo del fin de la presencia militar americana en Vietnam. 48 años de su clausura, nuevamente lo hace después de casi 20 años de permanente guerra cuyo costo ha sido astronómicamente alto, tanto en vidas como en dinero.

Después de haber sido protagonista de las dos guerras mundiales, los Estados Unidos jamás habían sido atacados internamente. El 11 de septiembre del 2001 la embestida de las torres gemelas de Nueva York marcaron el inicio de la llamada ”Guerra contra el terror”. En el ataque terrorista murieron unos 3.000 americanos, los Estados Unidos presumieron que Osama Bin Laden había sido el principal ejecutor del desastre de las torres, “En un mes tendrán noticias nuestras” manifestó el presidente George Buss. Pasado los treinta días de la embestida terrorista los americanos empezaron a bombardear a Afganistán donde decían que el Talibán líder de la organización Qaeda se escondía. Fue tal vez esta búsqueda más costosa que un país haya pagado por la exploración de un ciudadano. Después de casi diez años de continua persecución, el talibán terrorista fue dado de baja.

Luego de la retirada de los gringos del país afgano, los talibanes se tomaron el poder de manera rápida e inesperada lo que han puesto a los Estados Unidos enfrentar el problema de miles de personas que desean abandonar su país huyendo del terror.
La toma del grupo Talibán en Afganistán dejó en el medio a miles de civiles que esperan huir del país en busca de protección. Los vecinos, Irán, Pakistán y Turquía se preparan ante una eventual llegada masiva de refugiados. El Gobierno turco blinda sus fronteras para detener el paso y advierte a Europa que no está dispuesto a ser un “almacén de refugiados”. Mientras, Grecia insiste en que tampoco será la puerta de entrada a Europa y pide cooperación a la UE para gestionar los flujos migratorios.

Mientras países vecinos a Afganistán le cierran las puestas al flujo de emigrantes afganos, en nuestro país, el presidente Duque ha anunciado que Colombia se une al grupo de países que ofrecen apoyo a los Estados Unidos para aquellos ciudadanos afganos que prestaron ayuda a los gringos y que están en proceso de hacer un registro y un traslado migratorio a ese país, según el presidente los afganos estarán en Colombia de manera transitoria. Lo que en la práctica convierte al país en refugios de migrantes, aún no hemos superado la peregrinación de más de un millón de venezolanos y nos mezclamos en problemas que no nos pertenece.

Cabe decir que tan decisión presidencial se asemeja al dicho muy colombiano que dice: “no podemos con nuestras orejas y estamos buscado aretes”.