Comercializadora Internacional

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Escrito por:

Luis Tabares Agudelo

Luis Tabares Agudelo

Columna: Opinión

e-mail: tabaresluis@coruniamericana.edu.co


La Comercializadora Internacional es aquella persona jurídica que tiene por objeto social principal, la comercialización y venta de productos colombianos al exterior adquiridos en el mercado interno. O sea, prácticamente a las Pyme. Fueron creadas por medio del Decreto 1451 de 2017 “con el objeto de crear alternativas y oportunidades de crecimiento para las pequeñas y medianas empresas del país”.

Se busca con ellas promover el desarrollo del comercio exterior y que los productos nacionales lleguen a los diferentes mercados internacionales. De hecho, se le está apostando al crecimiento de las Pyme que en muchas ocasiones por falta de recursos o infraestructura difícilmente pueden exportar. Entonces, mediante este intermediario se cree que se comercializarán sus productos en los mercados internacionales.

En resumen, es una figura o herramienta con el fin de que se aumenten las exportaciones de las pequeñas y medianas empresas generando un “beneficio” entre las Pyme y las Comercializadoras internacionales.

Ahora bien, según el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, en Colombia hay 306 comercializadoras internacionales de las cuales el 70% exporta bienes no mineros energéticos, lo hace de los sectores agropecuario, industrial y agroindustrial.

Así las cosas, para que las comercializadoras internacionales puedan exportar los productos adquiridos a las Pyme sin pagar el IVA deben hacerlo máximo seis meses después de la compra. Si dejan pasar ese rango de tiempo sin hacerlo se ven sometidas a sanción aduanera equivalente al 100% de la compra realizada.

Con todo lo dicho, es menester mirar las cifras ya que según el Dane las exportaciones cerraron en el 2017 con un repunte de 19% comparado con el 2016 “caracterizadas por el crecimiento de las ventas externas del país en todos los grupos de productos”.

Posteriormente, aunque el 2018 presentó incremento del 10,4% comparado con el 2017, este comportamiento se debió al crecimiento de las ventas externas de los derivados del petróleo pues los productos agropecuarios, alimentos y bebidas presentaron una disminución de 0.7%

Mientras tanto, en 2019 las exportaciones de Colombia volvieron a caer esta vez en un 0.35% respecto al 2018 ocasionando un déficit en la balanza comercial debido que, al producirse incremento de las importaciones también fueron mayores que las exportaciones.

Difícil será que el 2020 nos vaya a mostrar buenas cifras en la relación de las exportaciones debido a la pandemia por la que aún estamos pasando. Puede ser por eso que el Dane nos informa que las exportaciones de Colombia de enero hasta agosto presentaron una reducción de 24.3% comparado con el mismo lapso del 2019.

En síntesis, aunque tenemos todo un Ministerio de Comercio, Industria y Turismo con millones de pesos en gastos para su funcionamiento, asimismo, se crean las comercializadoras internacionales como intermediarias ante las Pyme, en exportaciones de nuestro productos y servicios vamos para atrás como el cangrejo.

Digamos que las comercializadoras internacionales llegan como una oportunidad de negocio de comercializar en el exterior los productos de las Pyme, además, por esta figura se esperaba que se fomentara el acceso a nuevos mercados, pero como pueden contemplar “entre sus actividades la importación de bienes o insumos para abastecer el mercado interno o para la fabricación de productos exportables” todo apunta -según las cifras- que se están dedicando es a importar productos y mercancías.

Mejor sería que a partir de ahora, los gobiernos, -este y los que vienen- se dedicaran a que las Pymes exporten directamente sus productos obteniendo mejores ganancias y no creándoles intermediarios que se queden con la gran tajada de las utilidades muy parecido a lo que han padecido por años los campesinos en el mercado interno con los intermediarios que se les quedan con un gran pedazo de la torta de las utilidades.