La séptima etapa del Giro de Italia, entre Diamante y Potenza, con 196 kilómetros de recorrido y 4.510 metros de desnivel, supondrá la primera jornada de montaña, con el monte Sirino, de primera categoría, como principal obstáculo.
Las ascensiones al Passo Colla (2ª), Monte Sirino (1ª), que vuelve al Giro tras 23 años, el Monte Scuro (2ª) y la Sellata (3ª), pondrán a prueba al pelotón, que en los últimos 350 metros tendrán que exprimirse al máximo con un repecho máximo al 13% de pendiente.
A esta etapa llega el español Juan Pedro López (Trek-Segafredo) liderando la clasificación general por tercera jornada consecutiva, por delante del alemán Lennard Känma, a 38 segundos. Tercero es el estonio Rein Taaramäe (Intermarché) a 58, cuarto el británico Simon Yates a 1:42 y quinto el belga Mauri Vansevenant a 1:47.
Durante la jornada anterior, el colombiano Fernando Gaviria fue sancionado por la organización del Giro de Italia, que lo relegó al puesto 150 de la sexta etapa, el último del pelotón principal, tras un empujón a un ciclista del equipo DSM en los últimos metros del recorrido.