Chindia: Futuras potencias mundiales

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Escrito por:

Oscar Bravo Rojas

Oscar Bravo Rojas

Columna Sociológica

e-mail: osbraro@gmail.com


El que acuñó el término Chindia fue un político de la India llamado Jairam Ramesh. Chindia es un acrónimo que en términos generales hace alusión directa a China e India respectivamente.

Existen diversos factores que hacen que China e India (Chindia) sean consideradas de acuerdo a un informe BRIC, como los países con mayor potencial en los próximos 50 años. Entre estos están los de índole geográfico e históricas, pues la vecindad o proximidad fronteriza, lo cual hace que tengan alianzas estratégicas y el intercambio comercial sea más efectivo como países productores que han sido hasta el momento considerado por las potencias mundiales.

También tienen en común que demográficamente contienen alrededor de un tercio de la población mundial, equivalente al 40%, donde China posee 1.336.970.000 millones de habitantes seguidos de su socio la India 1.179.618.000 millones. Población Total: 2.516.588.000.

Históricamente podemos mencionar las concepciones religiosas, con la extensión masiva del Budismo entre chinos e hindúes.

Desde la perspectiva económica, existe una complementariedad binacional, creando uno un determinado producto que no compita o se cree en ambas naciones, ejemplo de lo anterior es el caso de China que sobresale en hardware, mientras que la India es fuerte en software, China es más fuerte en el campo de los mercados físicos, caso contrario de la India tiene su fortaleza en los mercados financieros mundiales, China en la industria manufacturera y en infraestructura mientras que la India es destacada en tecnología de la información y en servicios.

Aplicando un modo diferente de transformación, China y la India se convertirán en países superiores, en la economía del futuro. El crecimiento económico de China se caracteriza por la movilización del capital y del trabajo, la inversión extranjera, la manufactura a gran escala, y el papel jugado por la intervención del estado.

La economía de la India se halla liderada más por los sectores de ingeniería y servicios el capital privado, modos de comercialización que hacen énfasis en productos de alta calidad, en servicios de bajo costo, y de manufacturas en pequeña escala. La sociedad globalizada y sus líderes deberán comprender las ventajas competitivas y las dinámicas internas a ambos, China e India, quienes se abren campo a nivel mundial como futuras potencias comerciales.

La expansión china provoca temores. En 1975 el Producto Interno Bruto de India superaba al de China en 9%, hoy el PIB indio es sólo el 40% del chino. La China se ha convertido en un motor fundamental de la economía planetaria, que cada año recicla su superávit comercial de 124.000 millones de dólares con Estados Unidos mediante compra de bonos del Tesoro estadounidense. Está acelerando el proceso de urbanización y se estima que 400 millones de campesinos se trasladarán a las ciudades antes del 2020 pasando del actual 41,8% al 75% de urbanización.

En los países occidentales una trasformación semejante llevó tres siglos.

Los estudiosos del tema dicen que dentro de veinte años, al ritmo que llevaban estas dos naciones, se convertirán en las próximas potencias mundiales del planeta, por encima de los Estados Unidos.

Aquí surge un tema capital: si la mágica fecha del 2025 tiene fundamento, significa que la China está destinada a jugar un rol de potencia mundial en cualquier caso y más allá de sus intenciones.

El caso de estas dos naciones asiáticas debieran ser referente teórico y práctico para los países latino americanos, particularmente a Colombia, donde los índices de desarrollo económico y social están muy distantes de alcanzar el nivel de países que invierten en educación, tecnología, en el recurso humano, y los índices de corrupción son bajos e ínfimos comparados con los nuestros, que son el pan nuestro de cada día y asfixiante haciéndonos cada vez más atrasados y relegados en comparación con otras economías del orbe.