Escrito por:
Hernando Pacific Gnecco
Columna: Coloquios y Apostillas
e-mail: hernando_pacific@hotmail.com
La actual cuarentena ha servido, entre otras cosas, para recorrer virtualmente aquellos lugares por los que quisiéramos andar: ciudades, bosques o playas. Por ejemplo, España cuenta con invaluables tesoros culturales aportados por varias civilizaciones; fenicios, celtas, romanos, visigodos, musulmanes, etc. Una extraordinaria riqueza que desde la prehistoria se refleja en toda su geografía. Andalucía especialmente posee una magia única; gente, paisajes, cultura, gastronomía, historia, monumentos, objetos. Más que tener todo, rebosa en todo. Cada provincia es un mundo tan diferente que explorarlo toma mucho más tiempo y dedicación del que las guías viajeras nos hablan. Los lugares más emblemáticos son apenas un abrebocas de todas las sorpresas por descubrir que no se encuentran en los circuitos turísticos. No son solamente los “diez lugares que debes conocer”; son cientos de ellos en cada sitio.
Gadir (recinto murado en lengua fenicia), hoy Cádiz, es uno de los más antiguos asentamientos en Occidente. Fue el sitio de entrada de los fenicios a Europa y también el puerto por donde Cristóbal Colón sale en su segundo viaje al nuevo continente; llegaría por ver primera a Puerto Rico, Jamaica y Cuba. Los ibéricos fundan en la isla La Española (República Dominicana) La Isabela, ciudad después abandonada. Para Colón, Cádiz era realmente la ciudad de sus afectos, su centro náutico. Allí vivían muchos genoveses, un 10% de los gaditanos de entonces, quienes le apoyaban económicamente en sus viajes. Desde Cádiz había realizado varias expediciones a Marruecos y la Canarias. Se dice que el primer viaje de Don Cristóbal a este lado del mundo sale de Palos de Moguer por una deuda de la corona de Castilla con el puerto, donde había un astillero; el pago de la deuda fueron 2 naos: la Pinta y la Niña.
Cádiz, ciudad marina, es la ciudad de las mil culturas. Fundada en el año 1100 AC en una isla al lado del Río Guadalete está separada del continente por el caño de Sancti Petri. Se puede seguir la evolución histórica de la ciudad y de España misma desde las ruinas y objetos fenicios, las más importantes del mediterráneo occidental, hasta el exuberante puerto de la bahía, uno de los cinco más importantes del país, y los modernos miradores pasando por vestigios romanos, que se aprecian en lugares y museos de la ciudad.
El casco histórico sugiere la maternidad de nuestra Cartagena de Indias. Cuenta con numerosos lugares de comida, bebida y flamenco. Hay sitios de obligada visita: el Teatro Romano, la Catedral, el Teatro Falla, la Torre Tavia (la más alta) que servía de vigía, los castillos de San Sebastián y Santa Catalina, la Alameda Apodaca y el Parque de las Genoves. El mercado central, frente a la Plaza Libertad, es toda una institución; productos locales del esplendoroso Mediterráneo de precios increíbles, que los mismos mercaderes preparan al modo local. Auténticos manjares que demuestran la deliciosa gastronomía gaditana. El atardecer visto desde los miradores amurallados impresionantemente hermoso; una paleta de colores que Natura despliega en bellas formas cambiantes mientras, en el mar, las olas enmarcan y contrastan con sus azules y plateados el bello telón multicolor la llegada de la noche.
La provincia guarda magníficas sorpresas. Muy cerca de Cádiz está San Fernando, la ciudad de uno de los más importantes cantaores de flamenco de la historia: Camarón de la Isla. Siguiendo hacia el sur en busca de las columnas de Hércules, se encuentran Conil de la frontera, Barbate y Zahara de los atunes. Allí, la pesca de almadraba proporciona los mejores atunes para los cientos de preparaciones que aparecen en las cartas de bares y restaurantes de toda la provincia, tradicionales o contemporáneos. Finaliza esa ruta en Tarifa; el Parque Natural del Estrecho está a lados de esta histórica ciudad. Allí se encuentran el mar Mediterráneo con el Océano Atlántico; lugar de paso de especias migratoria, aves y mamíferos marinos. África está a sólo 14 kilómetros.