"Preocupación por residuos de carbón que han llegado hasta Playa Blanca". Así tituló de manera cruda pero real, el diario EL INFORMADOR, el pasado jueves 31 de marzo. Estamos advertidos.
Es triste que Playa Blanca, ese fastuoso lugar ubicado entre El Acuario y El Rodadero, con sus deslumbrantes arenales cristalinos, se encuentre en tan penosa situación. ¡Qué dirán los cachacos cuando vuelvan a visitarlo! Poco a poco se verán afectadas, Taganga, Arrecifes, Playa Cristal, Neguanje, y todo ese complejo marino que compone el Parque Tayrona, así como sus distintas especies de animales y su frondosa vegetación.
Y todo gracias a empresas como Drummond, cuya explotación del carbón el cual procede del departamento del Cesar, es embarcado en trenes a cielo abierto recorriendo los mares hasta llegar a nuestro puerto samario.
Deprime ver ese espectáculo de destrucción de la naturaleza en la entrada de la ciudad: las playas y a su lado vagones llenos del preciado mineral y ni que decir de los empleados de esa multinacional, en su mayoría salen enfermos y quienes se han congregado en una fundación que defiende sus intereses ante la negativa de la empresa para la que trabajaron de reconocerle sus daños y perjuicios.
¿Hasta cuándo los samarios soportaremos los abusos de compañías que nos explotan sin compasión alguna?, ¿hasta cuándo nos seguirá mamando gallo Metroagua?, ¿hasta cuándo la irresponsabilidad de Electricaribe?, ¿por qué somos tan pasivos frente a los abusos de estas grandísimas empresas?
Ñapa 1. ¡Puro populismo carroñero! Es lo que uno puede pensar de la propuesta del gobernador del Atlántico, el paquetazo Verano De La Rosa de impulsar una papeleta en las elecciones de octubre, en contra del centralismo. Este señor debe dedicarse es a gobernar y no a tender cortinas de humo que sólo complican la situación de invierno que vivió su región.
Ñapa 2. Son muchos los candidatos a la Alcaldía del Distrito. Esperemos conocer bien sus propuestas de gobierno, para saber cuál es la que más beneficia a la ciudad.