Otros protagonistas de centenares de infracciones que se cometen a diario en calles y avenidas de la ciudad son los vendedores ambulantes, conocidos como ‘carretilleros’. Octava entrega del especial de movilidad.
Los carretilleros son personas de muy bajos recursos que tienen que empujar diariamente una carretilla llena de productos, para poder llevar el sustento diario a sus hogares.
Aunque la mayoría de estos comerciantes se sitúan entre el Mercado Público y el Centro Histórico de Santa Marta, otra gran cantidad de carretilleros trabaja transitando las calles de la ciudad y en la octava entrega de este especial enumeramos algunos de las imprudencias cometidas por estos trabajadores ambulantes:
Se “vuelan” los semáforos en rojo
Esta escena fue captada por la cámara de EL INFORMADOR en la intersección de la Avenida El Ferrocarril con Avenida de los Estudiantes. La conducta imprudente del carretillero, afanado por llegar a la próxima sombra, termina por generar una situación de riesgo, no solo para él que es quien cuenta con menos protección, si no también para todos los actores viales que intervienen en la escena.
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Cruzar la calle sin precaución
Una de las imprudencias que más cometen los carretilleros es el cruzar las avenidas sin tener en cuenta el tránsito de los vehículos. Así lo evidencia esta imagen captada por EL INFORMADOR, sobre la avenida Campo Serrano con calle 26.
Allí, el carretillero decide cruzar la avenida obstaculizando el tránsito de los vehículos que tienen el semáforo en verde, exponiendose innecesariamente a un accidente de tránsito. Un ejemplo de la imprudencia desmedida de los vendedores ambulantes.
Ocupación del espacio público
Otra de las imprudencias comúnmente cometidas por los comerciantes ambulantes es la ocupación del espacio público. Esta situación se presenta con descaro en las calles del Mercado Público, sin embargo, esta escena fue captada en la calle 12 entre carreras 6 y 7, un sector en donde todo el que conduce su vehículo debe maniobrar en medio de las carretillas de frutas, los vendedores de tinto, los coteros que descargan la mercancía de los camiones, entre otros imprudentes.
Las esquinas, también ocupadas por los carretilleros, se convierten en plazas de comercio libre. Los peatones, sin tener por donde caminar, deciden ir por la calle, mientras que los conductores de vehículos deben 'zigzaguear' al volante.
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Hasta tienen sus propias “mañas”
Ante la falta de control de las autoridades del tránsito, algunos vendedores ambulantes deciden implementar sus propias estrategias de movilidad. Tal como lo muestra esta imagen captada por EL INFORMADOR, en donde el mismo carretillero hace uso de los conos – que deben ser para advertir de un accidente o una obra en la vía - para preservar su ‘espacio de ventas’.
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