Hacia la 1:00 p.m. de ayer llegaron nuevamente las embarcaciones llenas de pescados a surtir a los carretilleros, actividad que no cuenta con el visto bueno de Salud Pública y para la cual existe ya la plaza de Pescados y Mariscos.
A esto se suma la venta minorista en espacio público que es ilegal.
Los vecinos del sector han venido denunciando estos aspectos además de la inseguridad que representa el "forcejeo" entre los carretilleros y dicen que ya han habido conatos de pelea en los que los vendedores se amenazan con machete o cualquier otro tipo de arma contundente.
Por otra parte la playa Los Cocos está catalogada como turística y el arribo de parqueo de estas lanchas en número de 4 a 7 supone un peligro para los bañistas.
La policía del sector ha acudido en múltiples ocasiones y los ha dispersado, pero al día siguiente vuelven a aparecer. Esto viene sucediendo desde hace más de un mes y los malos olores y proliferación de moscas presagian posibles enfermedades virales.
El secretario de Gobierno, Adolfo Bula, aseguró que organizará el operativo de control correspondiente.