El ajedrez de La Haya

Columnas de Opinión
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Escrito por:

Jorge Caicedo Correa

Jorge Caicedo Correa

Columna: Opinión

e-mail: jcaicedoster@gmail.com



Con todo el respeto para los juristas, los columnistas y a los que atacan las decisiones del actual Gobierno en el zarpazo al mar territorial del Archipiélago de San Andrés y Providencia con los Cayos Roncador y Quita Sueño por parte de Nicaragua, de no interponer el recurso de revisión a la sentencia de La Haya 19/9/12 me permito recordarles que el artículo 61 de la CIJ en su numeral 3 reza así: "Antes de iniciar el proceso de revisión la Corte podrá exigir que se cumpla lo dispuesto por el fallo". Luego, la decisión es correcta, había que cumplir el fallo.

El hecho de no apelar la sentencia, en aclaración, consulta o en revisión, no es para quedarse soñando despierto con las Corbetas patrullando el paralelo 82, sino para llevar este caso a la ONU, al Consejo de Seguridad, con los vecinos afectados, Panamá, Costa Rica , Jamaica y Honduras para argumentar lo que se debió de hacer al inicio del litigio en 1.969, dejando en claro que el tratado Esguerra Bárcenas llevaba 41 años de vigencia, se firmó en 1928, con la nota de canje en el año de 1.930.

Es tratado aceptado. Inexplicable lo ocurrido. Nicaragua unilateralmente no lo puede desconocer alegando que no existía El Derecho del Mar que se firmó en 1.948 (Colombia no es participe) pero se olvida que para 1.969 inicio del litigio ya tenía 21 años dicho Derecho ¡Que ingenuidad jurídica haber ido al Tribunal en La Haya!

Difiero del concepto del expresidente Andrés Pastrana de acatar el fallo. Correcto que el 27/11/12, esto es ocho días después del fallo el presidente Juan Manuel Santos denunció el Tratado que le reconoce jurisdicción a la CIJ sobre Colombia retirándose del pacto de Bogotá de una forma inmediata.

El 16 de septiembre del 2013, Nicaragua se declaro inconforme con lo que ganó en el fallo de La Haya el 19/09/12 e instauró una nueva demanda para ampliar la plataforma continental de 200 a 350 millas, casi frente a Cartagena.

Sobre la plataforma extendida me permito aclarar que esto no es jurídico, es de topografía, si el país demuestra que no hay abismo marino, sino que es un declive suave que se adentra al mar hasta las 200 millas de la plataforma continental, puede solicitar 150 millas adicionales si firmó el tratado del mar.

Colombia no tiene porqué responder esta nueva demanda, no firmó el Tratado del Mar, pero si sería conveniente que llevara este caso al Consejo de Seguridad de la ONU como expansionismo nicaragüense, soportado con los estudios oceanográficos correspondientes, añadiendo que el Archipiélago de San Andrés con sus islotes es una entidad territorial.

En la última demanda de Nicaragua es que pretende que la CIJ de La Haya dé el rumbo de los límites en el Caribe con base en la sentencia en detrimento de los demás países limítrofes que tienen convenios con Colombia en contra de la Constitución política colombiana, convirtiéndola en la potencia caribeña contra los intereses también de Panamá, Costa Rica, Honduras y Jamaica deben acompañarnos en la ONU para frenar su expansionismo.

El actual gobierno heredó ese desastre, pero no es el momento de llorar por un pasado inoperante, que le aplicaron en el tratado Esguerra Bárcenas "Lo que me diste es mío, lo tuyo vamos a negociarlo" frente a las demandas sino luchar por el presente porque parece que Jamaica tiene otros intereses y el desconocimiento de las leyes del mar tiene sus consecuencias, afortunadamente la Canciller María A. Holguín, está haciendo las cosas bien.