El vallenato es el género musical qué nos une como colombianos y un icono qué nos define. Las letras y melodías, además de describir algún momento de nuestra vida, una historia y una etapa de nuestro ser, logran cautivar desde los pequeños hasta los más adultos. Bien decía Diomedes, “El amor es lo mismo que el vallenato, que conquista tu alma con una canción”.
Muchos dicen que el género está muriendo, qué otros ritmos están superando al vallenato, y puede qué si o puede que no sean tan exactas estas afirmaciones, lo que si tengo claro, es que el vallenato hoy vive gracias a Silvestre Dangond, quien con su talento, proyección y organización lo ha llevado a otro nivel.
¿Por qué afirmar esto? Sencillo. Cada vez qué Silvestre hace algo nuevo en el Vallenato, se vuelve tendencia. O cada vez que rescata canciones e incluso, artistas qué habían quedado en el pasado, vuelven a estar vigentes.
Basta solamente ver el tour entre grandes y el impacto que tuvo. Silvestre cantó canciones de todos los artistas y épocas, junto acordeoneros de todos los estilos. Y el éxito de esto no solo se mide en que los conciertos fueron Sold out, ni que tuviera que repetir su gira, solo recordemos qué muchas canciones que cantó volvieron a reactivarse, convirtiéndose en #1. “Después de tantos años”, “Cuando casi te olvidaba”, “Entrégame tu amor”, entre otras, volvieron a sonar en nuestras casas, emisoras, plataformas musicales y discotecas. Silvestre trajo del pasado al presente música que los jóvenes desconocían y hoy cantan a todo pulmón.
Gracias a esto, Dangond logró lo que en una época parecía imposible, reivindicar el vallenato romántico en la costa norte, donde había sido relegado y desplazado al interior del país. Este para mí es el mejor medidor. Ahora es común ver a Nelson Velásquez, Alex Manga, Jean Carlos Centeno, Jorgito Celedón, ofrecer conciertos en ciudades de la costa y encontrar su música posicionada y tan vigente como en la época que salió al mercado. Puedo ser ligero, pero esto empezó desde que Silvestre realizó el tour Entre Grandes, ¿Coincidencia o incidencia?
Así como este, son muchos los hechos que demuestran la brillantez y gallardía de Silvestre. Recordemos que fue muy criticado cuando le apostó a internacionalizar su carrera, con álbumes totalmente innovadores y colaboraciones con artistas mundiales como Nicky Jam, Maluma, Ñejo, Fonseca, entre otros, pero hoy esa decisión lo convierte en el único artista vallenato nominado a dos premios Latin Grammy, hecho al cual no se le ha dado la misma trascendencia que todo lo que enjuiciaron y reprocharon hace un par de años. Lidiar con esto no es fácil para un artista, por eso es importante ser objetivos. Esta apuesta refleja hoy resultados importantes y abre la puerta para que muchos artistas se atrevan a dar un paso más y salir de su zona de confort.
Como si nos refiriéramos a un álbum de Dangond, “El Original”, es el mejor calificativo para describir la versatilidad del artista. Ni hablar del éxito de la novela y el álbum homenaje a Leandro Díaz, también nominado al Grammy. Gracias a Silvestre, porque al personificar un grande del folklore conocimos una historia inspiradora y recordamos éxitos inmortalizados en el vallenato.
Conozco a Silvestre y soy testigo de su amor al vallenato, lo lleva en la sangre y sufre como si fuera una parte de sí mismo las dificultades que en algunos momentos sufre. Siempre se vive reinventando para qué todos sigamos escuchando hasta el fin de los días el género qué nos une como colombianos.
Viene Ta’ Malo, álbum que muchos gozaremos y otros naturalmente criticaran. Eso sí, habrá un común denominador, lo escucharemos por todos lados, bailaremos, dedicaremos y mantendremos vigente en el tiempo.
Silvestre, Dios te siga guiando. Gracias por lo que haces por Colombia, gracias por inspirar nuevas generaciones. Hoy ¡El Vallenato es Silvestre!