"Encontremos un lugar de construcción política para los que nos interesa cambiar la realidad que vivimos en el Departamento".
En nuestros días, los jóvenes debemos poseer cualidades porque el prototipo del hombre del siglo XXI debe ser más humano, más solidario, más congruente con lo que dice y hace, con una ética caracterizada en valores; porque no es conveniente, contar con ciudadanos dedicados al quehacer cotidiano basado en quien puede más sin importar que la propia comunidad guajira, reclama de nosotros hombres y mujeres, servirles con lealtad.
A pesar del esfuerzo de una nueva generación por debatir temas de actualidad y participar de los escenarios departamentales, éstos a la hora de la praxis se ven limitados, por el querer malintencionado de subvalorarnos. Esa crisis que hoy no es ajena a la política regional invita a reflexionar sobre la forma de trabajarla, no sólo en época electoral sino en todo momento.
Frente a eso el ciudadano al escoger debe pensar en quien permanentemente va de frente y da la cara y no aquel que ocasionalmente deja ver su rostro en busca del favorecimiento electoral.
Participar en las elecciones debe ser una necesidad más de compromiso con aportar a la democracia, que una oportunidad de representar sectores políticos que poco o nada han aportado a la consecución del bienestar guajiro. La situación departamental y municipal, no da más espera.
Cada día se vuelve más importante el aporte de nuevas ideas en la política, ya que la respuesta hacia un futuro más prometedor, debe darse a partir de la renovación existente en las distintas vertientes. Lo importante de esto no es que se esté dando por primera vez dicha participación, sino que ahora se está realizando con el conocimiento necesario que no permite, la improvisación que tradicionalmente conocemos.
El grado de generar espacios de participación y protagonismo son necesarios, y en algunas candidaturas la juventud ha encontrado la apertura para expresar aquello que piensa y siente, y que a diferencia de los últimos años, hoy los jóvenes tienen depositada su fe en proyectos que los incluye a todos, con autonomía y sin la limitación de sus capacidades.
Se necesita que esta generación política trascienda la anterior. Donde no se repitan los errores cometidos de la forma de hacer política y aprendamos de las experiencias vividas en la gestión pública. Los Jóvenes también quieren gobernar.
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