Durante ese tiempo se invita a los feligreses a reflexionar sobre el Vía Crucis, a tener un acercamiento con el sacramento de la confesión para estar preparados de cara con el acontecimiento de la Pasión de Jesús.
El Martes Santo ha recibido el nombre de ‘Martes de la Controversia’ al ser una fecha en la que el Jesús recibió traición y negación por parte de dos discípulos, además de los señalamientos de los líderes religiosos y fariseos de aquella época.
Por eso, hoy la Iglesia que peregrina en la fe y la Esperanza, vive y celebra el Misterio Pascual, sabiendo que la narración de los hechos que rodean la entrega de Cristo nos ubica, cada día, no en una cronología estricta sino en una clave de contemplación del corazón mismo del Señor que siente, sufre, ora, enseña y anuncia la grandeza de su ofrenda y va preparando su Sacrificio y su Exaltación.
Hoy, de la mano de la Palabra proclamada contemplemos, adoremos y celebremos, puesto que la Semana Santa es un momento para reflexionar sobre nuestra fe y nuestra relación con Dios.
La Pascua Judía tiene mucho de memorial agradecido, de fervorosa contemplación de una historia en la que cada paso está marcado por la evocación de los sucesos que dieron libertad al pueblo.
Había una convocatoria en la que la asamblea orante y la comunidad celebrante es reunida por quien hace de cabeza. El que preside la Pascua ha de marcar con la Sangre del Cordero las puertas del recinto: “…las dos jambas y el dintel de la casa”. En la Pascua de Jesús la sangre es la misma del Pontífice que celebra el convite con sus amigos, pero este ministro solemne es a la vez Siervo doliente, el que encarna en su vida el dolor de la traición. Hoy en el texto del Evangelio, interrumpiendo la narración de la Cena Pascual, nos hace saber que Jesús, estremecido, habla de algo triste: habla de la traición, de una conjura de enemigos que se confabulan para destruirlo, para hundirlo en la noche del dolor.
Le puede interesar:
Hoy se suplica que no vuelva a repetirse el estremecimiento doloroso del Señor, pero nos consta del dolor que vive el mundo cuando tantos, incluso nosotros, hemos vendido al Maestro, el pecado nuestro es el enemigo de Jesucristo, cuando maltratamos al hermano injustamente. A todos nos impacta la escena que hoy hemos escuchado: contemplamos e imaginamos el rostro de Judas, casi que podemos imaginar cómo se unen en el corazón del Maestro la amargura de la traición con la salsa amarga con la que la Pascua Judía recordaba los días de Egipto.
Hoy queremos sentir con Jesús. Orar con él por tantos que como el Maestro son traicionados y negados en este mundo, es estar junto al alma destrozada de la misma Iglesia tan humillada incluso por quienes alguna vez fueron beneficiarios de tanta misericordia. Muchos traidores de hoy fueron ayer comensales en la mesa de la clemencia.
Alguna vez el apóstol Pablo exhortaba a los Filipenses, a tener los mismos sentimientos de Cristo que por nosotros se abajó, se dejó humillar y traicionar. Hoy le decimos al Señor que nos ayude a vencer la tentación de entregarlo, de olvidar su lección de amor, que nos permita sentir con él el inmenso deseo de una humanidad que deje atrás las ofensas, las traiciones, las negaciones de la dignidad humana y se comprometa en la alegría de la esperanza, en la siembre de vida y de paz.
Le puede interesar: Procesión Domingo de Ramos
Estamos en la Cena de Jesús en este martes santo en la semana gloriosa de la Pasión y Muerte del Señor, en la semana de su triunfo Pascual. En labios de la Iglesia se quiere entender que en este día, nuestra cercanía al maestro es, no sólo profesión de fe, sino también pidiendo perdón por tantas traiciones, por tantas negaciones.
En el Salmo 70 que hoy hemos entonado, se dice que el creyente debe anunciar la salvación, incluso cantarla, es decir, revestirla de armonía, de gozosa esperanza, de jubilosa proclamación de la constante presencia de Jesús en nuestra vida. En el año de la oración hay también tanta alabanza que sucede a la lamentación, no olvidemos que antes que la rosa se abra las espinas rodean cada botón.
Los Amigos de Jesús nos ponemos en este Martes Santo en la tarea de buscar, encontrar y anunciar razones para que, por el camino de la fe, volvamos al amor de Dios. Para iluminar la Sociedad, a todo el mundo, para que todos se sientan motivados a vivir la aventura de Jesús, el Hijo de María la Virgen Fiel, con la certeza de que, el mismo amoroso Señor que en la Cena se llenó de tristeza, nos enseñará en la mañana de Pascua a sonreír con su victoria y a proclamar la gloria de su vida llena de paz y de esperanza.
Le puede interesar: El segundo día de la semana mayor: Lunes Santo
Cristo, luz de las naciones, llena nuestros corazones de esa luz de la fe que necesitamos para que, cuando llegue la noche, no vayamos a cambiar nuestro corazón por treinta monedas de plata ni por temor a las palabras de los que rondan en los atrios de la casa de Caifás. María, Madre de la fe, ayúdanos. Oh San José patrono de la Iglesia Intercede por nosotros. Amén.
Hoy queremos prometer al Señor que, por los méritos de tantos creyentes fieles, de tantos sucesores de Pedro, de tantos testigos de la gloria del Señor en casi dos mil años de Evangelio, que seamos sostenidos en la fe para que las vacilaciones que tantas veces hacen caer el corazón encuentren en el corazón del Amado Maestro, el apoyo y la fuerza para vivir su amor.
Hagamos del Martes Santo un día para vivir reconciliados
Es altamente recomendable que hoy reflexionemos en torno al camino hacia la Cruz (el Vía Crucis) y meditemos sobre el sacrificio y los dolores de Cristo
Agenda Católica
Catedral Basílica Menor del Sagrario y San Miguel Arcángel
Martes Santo (26 de marzo)
10:00 am – Pascua Infantil con los Niños de la Parroquia y confesiones
12:00 m – Eucaristía
4:00 pm – Confesiones
5:00 pm – Eucaristía
6:00 pm – Procesión con la imagen de Santa Marta
Parroquia San José
Martes Santo (26 de marzo)
6:30 a.m. Rezo del Viacrucis por los enfermos
7:00 a.m. Santa Misa (Confesiones durante la misa)
9:30 a.m. Pascua Infantil (Salón San José – Casa Cural)
10:00 a.m. Recepción de los Santos Oleos – Misa por los enfermos.
3:00 – 5:00 p.m. Pascua Juvenil (Salón San José – Casa Cural)
4:00 - 6:00 p.m. Encuentro juvenil
6:00 p.m. Santa Misa – (Confesiones durante la misa)
Parroquia San Francisco de Asís
Martes y Miércoles Santo (26 y 27 de marzo)
7:00 am, 11:30 am y 6:00 pm Eucaristía y confesión
11:00 am – Santo viacrucis
Parroquia Nuestra Señora de los Remedios
(Barrio La Paz)
Martes Santo (26 de marzo)
5:00 pm Confesiones
6:00 pm Eucaristía
Parroquia Nuestra Señora de la Candelaria
(barrio María Eugenia)
martes y miércoles Santo (25-26 y 27 de marzo)
5:00 pm Confesiones
6:30 pm Eucaristía
