Los Holguín

Columnas de Opinión
Tamaño Letra
  • Smaller Small Medium Big Bigger

Escrito por:

Juan Echeverry Nicolella

Juan Echeverry Nicolella

Columna: Purgatorio

e-mail: juanecheverry@hotmail.com

Twitter: @JPEcheverry



A través de la historia de este hermoso país, miembros de la familia Holguín han ocupado altas dignidades dentro del Estado colombiano. Nuestra actual ministra de Relaciones Exteriores es hija de ese mismo linaje de poder. Desciende directamente de algunos Embajadores, Cancilleres y Presidentes que Colombia ha premiado con tan honrosas posiciones.

Hasta ahí todo parece un cuento de rosas y honores. Sin embargo, los Holguín nunca han estado a la altura de tales responsabilidades.

Carlos Holguín Mallarino (tío bisabuelo de la actual Canciller) fue nada más y nada menos que el Presidente de Colombia que decidió regalar a España parte de nuestro patrimonio: 122 piezas de oro prehispánico en agradecimiento por establecer nuestros límites territoriales con Venezuela. A pesar de algunas críticas justificadas, en ese momento se prefirió cometer tremendo error y tener el gesto por el bien de las buenas relaciones internacionales.

Otro desafortunado Presidente de la familia fue Jorge Holguín Mallarino (bisabuelo de María Ángela y hermano del anterior). Mientras éste fue Ministro de Relaciones Exteriores le cedimos a Venezuela casi la mitad de la Península de la Guajira. Y mientras fue Ministro de Defensa se dio la Guerra de los Mil Días que concluyó con la perdida de Panamá que lamentamos hasta nuestros días. En ese momento el gobierno también prefirió la diplomacia meliflua ante el descontento popular.

Francisco Urrutia Holguín parecía ser otro fiel exponente de la trayectoria de su familia y consiguió ser embajador en Venezuela precisamente cuando nos tocó cederle a ese país el archipiélago de Los Monjes. Para entonces, también se prefirieron las buenas relaciones con los vecinos antes que la integridad territorial. Y no deja de ser paradójico, como mínimo curioso y hasta chistoso que el Presidente de esa época Roberto Urdaneta Arbeláez estuviera casado con doña Clemencia Holguín y Caro (hija de Carlos Holguín Mallarino y hermana del también Presidente Miguel Antonio Caro).

La actual Canciller no se quedó atrás. Desde esta semana también engalana el penoso álbum familiar con la pérdida del territorio marítimo ahora en manos de Nicaragua. María Ángela Holguín es la cereza que le faltaba a tremendo postre de incompetencias.

Todas las anteriores pruebas históricas parecen razones suficientes para que a nadie más se le ocurra nombrar un Holguín en algún cargo de poder por los siglos de los siglos.

Ante el fallo del lunes se apela nuevamente a las políticas del buen vecino. Pero ese cuentecito - que ahora surge como razón para no desconocer completamente el fallo de la CIJ - de sacrificar nuestra dignidad nacional por relaciones diplomáticas me recuerda a la trabajadora que se acuesta con el jefe para no perder el empleo. Lo primero en esto, como todo lo demás en la vida, deben ser los principios antes que la conveniencia. Y nuestra obligación ciudadana consiste en hacer respetar esos principios.

Ñapa: Los colombianos tenemos todo el derecho de exigirle al gobierno que no acepte el fallo de la Corte Internacional de Justicia de la Haya que nos quita casi 80 mil kms2 de mar. Las cortes internacionales no funcionan para derrocar la soberanía de nadie ni para afectar los derechos de ningún pueblo sobre lo que es suyo desde siempre.



Más Noticias de esta sección