Hoy, luego o mañana, todo deberá cambiar en el departamento del Magdalena. Tenemos un gobierno en lo departamental y ciudad capital, que actúan y se conducen en forma distinta a como deben actuar y conducirse los buenos gobiernos.
Y no es que queramos unos mandatarios escondidos, ocultos en sus zonas de confort, no, pero desde luego tampoco vedettes, y menos que no estimen e ignoren para todos los efectos las indicaciones de su propio equipo de gobierno, ni que tampoco nos deje haciendo cruces con todas y cada una de sus actuaciones, ni de lo que se les venga en gana en notorio detrimento de sus gobernados. Los mandatarios en todo tiempo y lugar deben unir, nunca dividir y mucho menos viendo, perorando o denunciando argucias, complots y enemigos donde nunca los hay, no los ha habido ni habrá, pues lo que la gente quiere es que se les gobierne bien y mejor, que no con mentiras, engaños, autoritarismos, demagogia ni con posturas populistas y mucho menos irrealizables.
Es tomar en sus manos la gestión gubernamental, establecer acuerdos multipartidistas, acordarse que no siguen en campaña, que es su deber y obligación gobernar con todos y a todos por igual, sin preferencias ni favoritismos, toda vez que es el mandatario de todos y no de unos pocos. No para ciertos sectores o grupos y menos con montos infinitamente más altos como estamos viendo en esta feria de malversación de fondos. El gobierno departamental sin duda ha actuado en forma diferente. Importan planes de apoyo para evitar quiebras o despidos generalizados, especialmente para pequeñas empresas y comercios, en el entendido que primero es salvar vidas y luego apoyar la economía.
Vamos a requerir, a necesitar, lo que es urgente y prioritario…y esto para que lo tengan en exacta cuenta como ciudadanos… gobernantes ocupados y preocupados, al frente de sus propios gobiernos, uniendo y no polarizando, atendiendo los acápites centrales de sus administraciones y no lo baladí, lo que a todas luces las hace inocuas y por ende perjudiciales a todo cuanto tiene que ver con buen gobierno y bien común.