Tras su abandono fue sumida a la destrucción por varios años por parte de habitantes en condición de calle que hizo necesario el sellamiento de puertas y ventanas en el abandono por parte de las anteriores administraciones distritales llegando a convertirse en habitad de personas en condición de calle y consumidores de drogas.
La visión hacia lo cultural que siempre tuvo el doctor Edgardo Vives Campo, quien para la época fungía como Alcalde Mayor (1996-1999), lo llevó a cerrar en favor del Distrito de Santa Marta el 3 de octubre de 1996, el contrato de compra de la majestuosa Casa Goenaga, ubicada sobre la Calle de La Cruz (calle 12) con Callejón del Río (carrera segunda), por un valor de 140 millones de pesos, para que fuera utilizada en beneficio de la comunidad. Dice claramente el contrato
Pero lo que nunca pensó el exmandatario Q.E.P.D., que por varios años ha permanecido sumida en el abandono de las administraciones distritales llegando a convertirse en habitad de personas en condición de calle y consumidoras de drogas.
Jaime Solano Jimeno quien, en su calidad de Alcalde Mayor, el 2 de noviembre de 1999, en una decisión de apoyó cultural firmó el convenio a 12 meses prorrogables, entre el Distrito samario y la Alianza Colombo Francesa, que tenía como representante legal a la señora Carmen Abondano de Dávila.
Desde entonces, el objeto de dicho convenio no era más que, aunar esfuerzos para apoyar los procesos de fomento y desarrollo cultural en el Distrito, e impartir clases de lengua francesa a los profesores de idiomas, artistas, gestores, promotores culturales y funcionarios, actividades que se mantuvieron por más de 20 años y que beneficiaron a muchos samarios.
Ver documento pdf: CASA GOENAGAGA
‘Antro’ de
drogadicción
Pero para desgracia de la cultura y el patrimonio de la capital del departamento de Magdalena, solo faltó que el convenio entre el Distrito y la Alianza Colombo Francesa fuera terminado de manera unilateral por la administración distrital de para que en poco tiempo, una de las edificaciones más insignes del Centro Histórico de la ciudad, y en la que funcionó la biblioteca San Pedro Alejandrino, catalogada como la más grande de todos los tiempos en esta parte del país, estuviera deshabitada por varios meses, fuera invadida y quedara a disposición de los habitantes de calle quienes luego de saquearla y dejarla sin rejas, puertas y ventanas, la redujeran a un ‘antro’ que albergaba a la indigencia y a la drogadicción.
Esto llegó a convertir en los últimos 10 años al sector en uno de los más peligrosos de la ciudad, en donde los atracos, las agresiones y la prostitución estaban a la orden del día, lo que impedía el tránsito de la comunidad de bien.
Estación
de Policía
Durante la administración distrital anterior, la edificación fue cedida a la Policía Metropolitana para que fuera ubicada una subsede para garantizar la seguridad y recuperar el sector, pero solo quedó en ‘papeles’, hasta hace poco más de un mes cuando el alcalde Carlos Pinedo Cuello a través de una iniciativa que pretende la revitalización del Centro Histórico se trabajó en la recuperación del inmueble para que funcionara como estación policial.
Ante esta situación, las reacciones no se hicieron esperar, y bajo los argumentos establecidos por las autoridades nacionales, señalaron que en el domicilio declarado como Casa Patrimonio del Centro Histórico de Santa Marta solo puede utilizarse de acuerdo con la norma, por entidades culturales que tengan que ver con educación y la parte social.
Entre tanto, se conoció que la Alianza Francesa, a través de Cindy Zawady, su presidenta en Santa Marta, le dirigió una carta al alcalde Pinedo Cuello para solicitarle se siga recuperando este espacio arquitectónica, cultural, educativa y social.
Así mismo dio a conocer, los deseos de la Alianza Colombo Francesa de rescatar el convenio y retomar sus actividades en su antigua sede para trabajar en lo cultural y lo social, y de paso se restaurarían los lazos de cooperación entre Francia y Santa Marta, lo que se convertiría en un paso importante para ese país como uno de los principales aliados para la celebración de los 500 años de la fundación de la ciudad.
Ver documento pdf: Documento 2 de casa Goenaga
Dice la Sociedad Colombiana
de Arquitectos del Magdalena
Sin desconocer que, la presencia de la Policía Metropolitana en la Casa Goenaga obedecería a una medida provisional para sanear el sector de la inseguridad y el deterioro urbano que se generó luego del abandono a la que fue sometida, esta sigue siendo una de las joyas de la arquitectura patrimonial y su adquisición fue realizada por el alcalde Edgardo Vives Campo, con el fin específico de fomentar la educación y la cultura; esta labor que realizó la Alianza Colombo Francesa mientras tuvo bajo su tutela el inmueble manteniéndolo físicamente impecable, ejecutando una agenda cultural
sostenida, y permitiéndole a gran cantidad de jóvenes samarios aprender la lengua gala.
“La Sociedad Colombiana de Arquitectos del Magdalena da testimonio de la buena gestión cultural y educativa de la Alianza Francesa en la ciudad y por tal razón ha sido solidaria
acompañando la recuperación de su presencia institucional”, señaló la SCA.
Ver documento pdf: Documento 3 Casa Goenaga
La Casa Goenaga fue mandada a construir en 1916 por el gobernador de la época, Florentino Goenaga Gómez, y desde allí conserva su fachada colonial y es considerada patrimonio histórico de Santa Marta.
