A ritmo de vallenatos y rancheras, los ancianos pasaron una tarde agradable.
Después de ocho meses de confinamiento, los abuelos del Asilo Sagrado Corazón de Jesús disfrutaron de una tarde llena de música y alegría.
Los abuelos estuvieron con los protocolos de bioseguridad retirados de la reja, desde donde se impartió la serenata.
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La serenata especial se dio gracias a la iniciativa de Erika Schiller, gestora en el Asilo, quien convocó amigos y personas cercanas para dar esta sorpresa a los adultos mayores que residen en este lugar.
La tanda musical inició con un grupo de vallenato, el cual dedicó algunas canciones al grupo de adultos mayores, entre esas, Mírame fijamente del maestro Alejandro Durán.
Más tarde, el turno fue para los mariachis quienes interpretaron algunas canciones, entre esas, Cielito lindo de Ana Gabriel.
La gestora de esta bonita sorpresa, Erika Schiller envió un mensaje a los samarios a través de EL INFORMADOR.
“Los invito a que recuerden que aquí están los abuelos y que nosotros en algún momento vamos a llegar a la edad de la ancianidad. Que ellos mientras estén en este mundo sepan que hay personas que les pueden hacer la vida feliz y que más que el Creador que nos da la oportunidad que se den este tipo de cosas”, señaló.
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