La idea de emprendimiento de Mónica Vives Saravia, propietaria del negocio de confecciones de vestidos de baño, la tiene desde que era menor de edad, hasta el punto de convertirla en la persona más joven en registrar su Matrícula Mercantil en la Cámara de Comercio de Santa Marta.
Redacción
EL INFORMADOR
Con tan solo 16 años de edad, Mónica Vives Saravia inició su idea de negocio de diseño y confección de trajes de baño para damas y caballeros, luego de terminar su bachillerato; un emprendimiento que con ayuda de sus padres viene ampliando sus horizontes para llegar a ser una diseñadora de modas.
Para la creación de su propia marca, Mónica decidió fusionar los apodos que sus papás le pusieron a ella y a su hermana, para quedar finalmente como Michimachi, la marca que se convirtió en una carrera personal con la intención de llegar a estudiar Diseño de Moda en el Instituto Marangoni, en Milán.
Desde hace más de un año, inició su sueño de ser una emprendedora, sueño que la llevó a convertirse en la persona más joven de la ciudad en registrar su Matrícula Mercantil de su propia marca en la Cámara de Comercio de Santa Marta. Hoy, a sus 18 años de edad, ha materializado su negocio con la idea de expandir su empresa a largo plazo.
“ La idea que tengo es ir a Milán a estudiar Diseño de Moda y necesito tener algo creado por mi para poder estudiar lo que quiero”, indicó Mónica.
El proceso de hacer el registro en la Cámara de Comercio, luego de crear un negocio nuevo, es que este paso sirve como requisito para permitir a los empresarios ejercer cualquier actividad comercial y acreditarse públicamente como tal. “Inscribí mi marca en el registro mercantil de la Cámara de Comercio cuando tenía 16 años, porque quiero y busco desarrollar mi emprendimiento con proyección profesional y esta me puede brindar apoyo en diferentes capacitaciones, misiones comerciales, ruedas de negocios, ferias y asesorías en comercio exterior”, explicó la joven.
Es importante mencionar que la renovación de la Matrícula Mercantil le proporciona al sector empresarial el respaldo legal que necesita para poder funcionar y crecer. Además, acredita al comerciante frente a sus clientes y proveedores como legalmente constituido y con una trayectoria reconocida, aspectos que generan confianza y facilitan los negocios.
Igualmente, se benefician del portafolio de productos y programas que ofrece la Cámara de Comercio y diversas entidades públicas y privadas en temas de desarrollo y fortalecimiento empresarial, que como bien ya menciónó la empresaria, son capacitaciones, ruedas de negocios, misiones comerciales, programas de escalamiento e iniciativas clúster, son algunas de las herramientas a las que pueden acceder los empresarios formales y renovados.
La importancia del emprendimiento para jóvenes como Mónica dentro del país, es que pueden ser el motor que propicie el cambio de la economía y el avance en general de una nación. Por esta razón, muchos jóvenes como ella que desean emprender su propio negocio necesitan ser capaces de afrontar las tareas diarias propias de un emprendedor.
De acuerdo con la joven emprendedora, para conseguir un propósito y sacarlo adelante se necesita mucho esfuerzo y dedicación. “Toca trabajar duro porque van haber muchos obstáculos, la clave es no perder la fe y no dejar de creer en uno mismo”, fueron las palabras de Mónica.
Ahora la futura diseñadora de modas, lleva dos colecciones todas inspiradas en la naturaleza, en el mar y la playa, al igual que en la cultura samaria, gracias a la gran biodiversidad que le ofrece la ciudad de Santa Marta. Con paisajes florales y la gama de colores que tienen los escenarios de las playas de la ciudad, Mónica los combina para crear lo que más les gusta hacer, sus diseños.
La dueña de la marca Michimachi, con esmero y dedicación saca adelante sus diseños de vestidos de baño, con el objetivo de seguir ampliando sus productos y próximamente estará sacando su tercera colección. En la cuenta en Instagram @michimachi_ se encuentran todas sus creaciones con precios asequibles.
“Toca trabajar duro porque van a haber muchos obstáculos, la clave es no perder la fe y no dejar de creer en uno mismo”, fueron las palabras de Mónica.