La representante que citó el debate afirmó que el incremento es un golpe duro para los hogares en todo el territorio nacional.
Ante el incremento en el precio de la gasolina, los ministros de Minas, Irene Vélez, y de Hacienda, Ricardo Bonilla, realizaron un debate de control político en la Cámara de Representantes.
Esto llega en un contexto en el que se muestra un descontento popular por el incremento constante que ha tenido el galón desde octubre del año pasado. Se debe señalar que en promedio ya vale $11,767, el jefe de Hacienda manifestó que tendría que ubicarse en torno a los 16,000 pesos para cerrar el hueco en el Fondo de Estabilización de Precios del Combustible FEPC, que cerró 2022 en $97 billones.
Pese a que los expertos coinciden en que ajustar el precio de los combustibles es un acto de responsabilidad con las finanzas del país, el costo político de tocarles el bolsillo a los consumidores es alto. De hecho, la representante a la Cámara por el partido Dignidad y Compromiso, Jeniffer Pedraza, citó el debate argumentando que se trata de un golpe muy fuerte para las familias colombianas y su costo de vida.
Pedraza asegura también que, una vez se haga efectiva el alza en el diésel, el impacto será peor, ya que empezaría a afectar la canasta básica de millones de hogares.
“Mucho más cuando consideramos el diésel, que es un bien que se necesita para el transporte y la comercialización de alimentos. Incrementar el precio al diésel va a disparar el precio de la canasta básica familiar. Se está jugando el hambre de los hogares colombianos”, indicó.
Para la congresista, la acción inicial que debería adelantar el Gobierno tendría que ser el cambio en la fórmula con la que se calcula el valor de los combustibles, considera que no tiene en cuenta que el 70% de la gasolina que consumen los colombianos se produce en el país.
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No obstante, varios expertos incluído el ministro de Hacienda, indicó: "No es posible obligar a Ecopetrol a vender el combustible a un precios inferior a la cotización internacional del barril, toda vez que eso afectaría los ingresos de la compañía y la plata que le transfiere a la Nación para la inversión social, que solo en 2022 ascendió a $42 billones".
Por otro lado, el director de Fedesarrollo Luis Fernando Mejía, indicó que el subsidio a los combustibles generó un saldo rojo en la caja de la Nación que sobresale los $25 billones que se esperan recaudar con la reforma tributaria y no tiene sentido un gasto tan alto destinado a subsidiar combustibles.
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