Electricaribe pasa al ‘tablero’ en el Concejo de Santa Marta

34.952 familias residen dentro de los barrios subnormales y al no estar legalizados, en la actualidad no se encuentran facturando y ya existe una deuda vencida que supera los $93 mil millones.

Distrito
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El gerente de la empresa prestadora del servicio de energía en el Magdalena, respondió las inquietudes de los cabildantes relacionadas a las quejas de líderes barriales por el pésimo y costoso servicio.

Ante las continuas quejas por las irregularidades en la prestación del servicio de energía eléctrica en barrios de Santa Marta, los concejales de la corporación edilicia invitaron a representantes de Electricaribe, al igual que a funcionarios del Distrito para escuchar el balance de la operación que ejerce la empresa electrificadora.

En el recinto estuvo el gerente de Electricaribe Magdalena, Edwin Goenaga Grandet, al igual que el secretario de Gobierno, Adolfo Bula y el de Planeación, Raúl Pacheco y la directora de Mercados Especiales, María Elvira Vides, quienes expusieron el panorama que se vive en los barrios de la ciudad y las soluciones que se darían para el mejoramiento del servicio, sobre todo en barrios subnormales.

El concejal Jaime Linero, citante de este debate, formuló una serie de interrogantes al representante de la empresa como: decir cuántos barrios subnormales reciben el servicio; cuantos transformadores hay instalados y conocer cuál es la cartera que se tiene por parte de los usuarios.

Barrios subnormales

El gerente de Electricaribe expuso que en la actualidad en Santa Marta existen 108 barrios subnormales que tienen redes eléctricas instaladas de forma ‘antitécnica’ y a su vez aclaró que por las condiciones de subnormalidad, la empresa no es responsable de la operación, mantenimiento y reposición de las mismas.

Al mismo tiempo indicó que en estos barrios hay instalados 559 transformadores, cifra que es variable porque va creciendo ya que son gestionados por la misma comunidad. “No sabemos quién los instala pero los encontramos instalados de manera antitécnica y que en su mayoría se encuentran en mal estado y recargados porque empiezan con un número determinado de familias y va creciendo, y como no es de Electricaribe, no es responsabilidad de la compañía la reposición de estos”, dijo Goenaga.


Bajo estas condiciones, son 34.952 grupos familias que residen dentro de los barrios subnormales y que se surten del fluido eléctrico, y al no estar legalizados, en la actualidad no se encuentran facturando. Según el gerente de la empresa, ya existe una deuda vencida que supera los $93 mil millones ya que el promedio por factura es de $111 mil pesos, dejando así un promedio de deuda por casa de 2 millones 680 mil pesos al año.

A nivel regional más del 80 por ciento de la subnormalidad eléctrica del país se encuentra en la Costa Caribe colombiana. “El Magdalena en general es uno de los departamentos que tiene mayor subnormaliad eléctrica de la costa. En la Región Caribe existen 292 mil familias asentadas en 1.622 barrios subnormales en toda la costa”.

Soluciones a la ilegalidad

Ante la preocupación de este nivel de ilegalidad, una de las soluciones para mejorar el servicio es la ejecución del Proyecto de Normalización Eléctrica, Prone, que consiste en normalizar al 100 por ciento las redes de barrios subnormales e instalar por nuevas adecuadas a la carga. “El Gobierno contrata a contratistas para que ejecuten esos proyectos, luego de ejecutados con sus medidores en cada una de las viviendas, se le entrega para la operación y mantenimiento a Electricaribe”.

Los proyectos que fueron adjudicados con contratos desde el 2008 al 2012 la mayoría de estos se entregaron y finalizaron y hoy son objeto de manteamiento y operación por parte de la empresa, sin embargo, Goenaga mencionó que algunos no pudieron ser entregados por opinión de la comunidad.

Los funcionarios de la Alcaldía distrital, también citados a la sesión intervinieron. Para el secretario de Gobierno, Adolfo Bula, luego de escuchar al ejecutivo, manifestó que muchos quieren estar en la legalidad y que se formalicen los barrios en materia de los servicios.

“No es posible que el Distrito invierta en un sistema tan deficiente y premoderno… En el programa de las obras menores del año pasado no se pudo hacer un proyecto de electrificación porque fue imposible ponernos de acuerdo…Es irresponsable decir que aquí las comunidades son como las que no desean la normalización o que el gobierno distrital no tiene la decisión de invertir, o como si fuéramos amantes dela cultura del no pago, de la informalidad e ilegalidad”, precisó Bula.

La comunidad interviene

Según Marta Escorcia, presidente de la Junta de Acción Comunal del Portal de las Avenidas, uno de los barrios que dejó de ser subnormal desde hace algunos años, explicó que en un principio se opusieron al proyecto Prone ya que la comunidad no quería que se instalaran contadores que marcaran un monto que no era acorde a lo consumido.

A su turno, Roberto Granados, líder del barrio Santa Ana, pidió que Electricaribe hiciera un censo. “Nosotros queremos realmente la factura, somos un barrio legalizado, tenemos que estar normalizados eléctricamente y no lo estamos, queremos saber si nosotros fuimos beneficiados por el Prone, pues hay información de que sí fuimos beneficiados pero no se ejecutó nada en nuestro barrio”.
Ante las continuas quejas por las irregularidades en la prestación del servicio de energía eléctrica en barrios de Santa Marta, los concejales de la corporación edilicia invitaron a representantes de Electricaribe, al igual que a funcionarios del Distrito para escuchar el balance de la operación que ejerce la empresa electrificadora.En el recinto estuvo el gerente de Electricaribe Magdalena, Edwin Goenaga Grandet, al igual que el secretario de Gobierno, Adolfo Bula y el de Planeación, Raúl Pacheco y la directora de Mercados Especiales, María Elvira Vides, quienes expusieron el panorama que se vive en los barrios de la ciudad y las soluciones que se darían para el mejoramiento del servicio, sobre todo en barrios subnormales.El concejal Jaime Linero, citante de este debate, formuló una serie de interrogantes al representante de la empresa como: decir cuántos barrios subnormales reciben el servicio; cuantos transformadores hay instalados y conocer cuál es la cartera que se tiene por parte de los usuarios.
Barrios subnormales El gerente de Electricaribe expuso que en la actualidad en Santa Marta existen 108 barrios subnormales que tienen redes eléctricas instaladas de forma ‘antitécnica’  y a su vez aclaró que por las condiciones de subnormalidad, la empresa no es responsable de la operación, mantenimiento y reposición de las mismas.Al mismo tiempo indicó que en estos barrios hay instalados 559 transformadores, cifra que es variable porque va creciendo ya que  son gestionados por la misma comunidad. “No sabemos quién los instala pero los encontramos instalados de manera antitécnica y que en su mayoría se encuentran en mal estado y recargados porque empiezan con un número determinado de familias y va creciendo, y como no es de Electricaribe, no es responsabilidad de la compañía la reposición de estos”, dijo Goenaga.Bajo estas condiciones, son 34.952 grupos familias que residen dentro de los barrios  subnormales y que se surten del fluido eléctrico, y al no estar legalizados, en la actualidad no se encuentran facturando. Según el gerente de la empresa, ya existe una deuda vencida que supera los $93 mil millones ya que el promedio por factura es de $111 mil pesos, dejando así un promedio de deuda por casa de 2 millones 680 mil pesos al año.A nivel regional más del 80 por ciento de la subnormalidad eléctrica del país se encuentra en la Costa Caribe colombiana. “El Magdalena en general es uno de los departamentos que tiene mayor subnormaliad eléctrica de la costa. En la Región Caribe existen 292 mil familias asentadas en 1.622 barrios subnormales en toda la costa”.
Soluciones a la ilegalidadAnte la preocupación de este nivel de ilegalidad, una de las soluciones para mejorar el servicio es la ejecución del Proyecto de Normalización Eléctrica, Prone, que consiste en normalizar al 100 por ciento las redes de barrios subnormales e instalar por nuevas adecuadas a la carga. “El Gobierno contrata a contratistas para que ejecuten esos proyectos, luego de ejecutados con sus medidores en cada una  de las viviendas, se le entrega  para la operación y mantenimiento a Electricaribe”.Los proyectos que fueron adjudicados con contratos desde el 2008 al 2012 la mayoría de estos se entregaron y finalizaron y hoy son objeto de manteamiento y operación por parte de la empresa, sin embargo, Goenaga mencionó que algunos no pudieron ser entregados por opinión de la comunidad.Los funcionarios de la Alcaldía distrital, también citados a la sesión intervinieron. Para el secretario de Gobierno, Adolfo Bula, luego de escuchar al ejecutivo, manifestó que muchos quieren estar en la legalidad y que se formalicen los barrios en materia de los servicios.“No es posible que el Distrito invierta en un sistema tan deficiente y premoderno… En el programa de las obras menores del año pasado no se pudo hacer un proyecto de electrificación porque fue imposible ponernos de acuerdo…Es irresponsable decir que aquí las comunidades son como las que no desean la normalización o que el gobierno distrital no tiene la decisión de invertir, o  como si fuéramos amantes dela cultura del no pago, de la informalidad e ilegalidad”, precisó Bula.
La comunidad intervieneSegún Marta Escorcia, presidente de la Junta de Acción Comunal del Portal de las Avenidas, uno de los barrios que dejó de ser subnormal desde hace algunos años, explicó que en un principio se opusieron al proyecto Prone ya que la comunidad no quería que se instalaran contadores que marcaran un monto que no era acorde a lo consumido.A su turno, Roberto Granados, líder del barrio Santa Ana, pidió que Electricaribe hiciera un censo. “Nosotros queremos realmente la factura, somos un barrio legalizado, tenemos que estar normalizados eléctricamente y no lo estamos, queremos saber si nosotros  fuimos beneficiados por el Prone, pues hay información de que sí fuimos beneficiados pero no se ejecutó nada en nuestro barrio”.




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