Las fiestas patronales de la Virgen se llevaron a cabo de manera atípica, pero con la misma fe y devoción de un pueblo que ora unido por la salud y el bienestar.
A las 8:00 de la mañana todas las parroquias de la ciudad celebraron la eucaristía de manera simultánea y los feligreses y devotos de la 'Vieja Mello' recibieron el cirio bendecido cumpliendo con el aforo y los protocolos de bioseguridad.
En el marco de esta celebración, el alcalde de Riohacha, José Ramiro Bermúdez Cotes, rindió homenaje a las víctimas del Covid-19, el cual ha cobrado la vida de millones de personas alrededor del mundo.
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En la Catedral Nuestra Señora de los Remedios, reposaron algunas fotografías de las 185 personas que no pudieron ganarle la batalla a esta enfermedad, pero que continúan vivos en el corazón de sus familiares y amigos.
El emotivo acto es un llamado a la fe, la unidad, la esperanza y la reconciliación, como tesoros valiosos para sobrellevar las dificultades y pérdidas ocasionadas por la pandemia, que hoy viste de luto a muchas familias riohacheras.
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“Hemos despedido a 185 hermanos por causa del Covid-19, un hecho doloroso que ha marcado nuestro rumbo. Hoy, ante la Virgen de los Remedios le rendimos homenaje a quienes han partido dejando un vacío incalculable; personas valientes que lucharon hasta el último minuto contra este trágico virus”, manifestó el alcalde José Ramiro Bermúdez Cotes.
Asimismo, el mandatario aseguró que, “el dolor de las familias que han perdido sus seres queridos es un dolor compartido. Resalto la importancia de reflexionar sobre lo que ha sido uno de los períodos más difíciles en la historia. Este es un llamado a proteger nuestra vida y la de nuestros seres queridos”.
Sobre las 5 de la tarde, la Virgen de los Remedios visitó los barrios de la ciudad para bendecir a los riohacheros con su amor maternal.
