Un año más sin Borges

Columnas de Opinión
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Escrito por:

José Vanegas Mejía

José Vanegas Mejía

Columna: Acotaciones de los Viernes

e-mail: jose.vanegasmejia@yahoo.es



Exactamente hoy se cumplen 27 años de la muerte de Jorge Luis Borges. Estamos sin su presencia humana pero no sin su obra prodigiosa. El 14 de junio de 1986 se extinguió el ciclo vital del poeta y cuentista argentino. Ocurrió en Ginebra, Suiza. 

Este escritor, que había nacido el 24 de agosto de 1899 en Buenos Aires, era hijo de un abogado y profesor de psicología en una escuela normal; el niño Georgie, como lo llamaban en su casa, aprendió el idioma inglés antes que el español, razón por la cual leyó el Quijote por primera vez en una traducción. Estudió en Ginebra y vivió en España; todo antes de cumplir los veinte años. 

Su sola afición y pasión por crear revistas literarias podrían reservarle un lugar en las letras |hispanoamericanas y universales. Pero Borges apenas comenzaba a insinuarse y a señalar que su vida cultural sería no solo extensa sino destacadísima en el campo de las letras.

En 1914 Borges aprendió francés y latín en Suiza y se familiarizó con las obras de Víctor Hugo, Zola, Voltaire, Flaubert, Maupassant y los poetas simbolistas; también descubrió a Carlyle y a Chesterton, que ejercerían en él gran influencia. Durante esos años aprendió alemán por su cuenta y así pudo comprender a los poetas expresionistas.

Por esa época conoció las obras de filósofos alemanes, especialmente de Schopenhauer y de Nietzsche, quienes marcaron en forma decisiva su pensamiento. En Argentina Jorge Luis Borges participó en la fundación de las revistas Prisma (1921-1922), Proa (1922-1926) y Martín Fierro. En 1938 sufrió un accidente grave que le afectó la visión a causa de una herida en la cabeza.

Con el tiempo padecería ceguera total. No obstante, desde 1938 hasta 1946 trabajó en la Biblioteca Nacional de Buenos Aires y se convirtió en director de la misma desde 1955 hasta 1973. A partir de 1955 fue profesor de literatura inglesa en la Universidad de Buenos Aires.

La primera época de Borges está signada por la poesía, género en el que se destacan temas históricos de su país, recogidos en los volúmenes 'Fervor de Buenos Aires' (1923), 'Luna de enfrente' (1925) y 'Cuaderno de San Martín' (1929). Poco a poco el escritor fue abandonando la poesía para dedicarse al ensayo y posteriormente al cuento.

En 'Inquisiciones' (1925) el autor reunió algunos de sus ensayos filosóficos y literarios. Una colección de cuentos basados en criminales reales es la titulada 'Historia universal de la infamia' (1935). La colección de poemas 'Ficciones' y 'El Aleph' son obras famosas de Borges.

En 1961 Borges recibió el Premio Formentor, otorgado por el Congreso Internacional de Escritores. Este es, prácticamente, el comienzo de su reputación internacional. También recibió el Premio Alfonso Reyes, en México (1973). Con su vasta producción de cuentos Jorge Luis Borges creó un mundo fantástico, metafísico y totalmente subjetivo.

Su obra a veces no es de fácil comprensión debido a una simbología personal que el autor se esmeró en crear y perfeccionar. El propio Borges se define como 'un hombre de letras que refleja en sus escritos su propia confusión y el respetado sistema de confusiones que llamamos filosofía, en forma de literatura'.

Borges fue un devorador de conocimientos y estudió con profundidad la obra de grandes escritores y pensadores ingleses, entre ellos Chesterton, Joseph Conrad, Robert Louis Stevenson, Rudyard Kipling y Thomas de Quincey. La obra de Borges está poblada de temas recurrentes que giran alrededor de la condición humana, del tiempo, del destino y de la muerte.

Hay en su producción un trasfondo filosófico que se desplaza entre laberintos serpenteantes y con frecuencia se refleja en simbólicos espejos. Algunas frases de Borges son: "Somos nuestra memoria. Somos ese quimérico museo de formas inconstantes, ese montón de espejos rotos". "La muerte es una vida vivida. La vida es una muerte que llega". "Que otros se jacten de las páginas que han escrito. A mí me enorgullecen las que he leído".