“La paz es más difícil que la guerra.Se necesitan dos para hacer una paz y Solamente uno para hacer una guerra.” Paul Valery
Dentro del desarrollo de la teoría sociológica reconocida a nivel mundial encontramos dos visiones, siempre antagónicas de la sociedad, desde luego cada uno de estos teóricos tratan por todos los medios de brindar una interpretación concreta y acertada de la realidad societal.
Hay una vertiente, la cual analiza la sociedad como armónica e integrada donde impera un contrato y control social y por ende propugnan por mantener un orden social, tomando como base o fundamento un sistema moral, de valores y normas sociales acompañado desde luego de la acción cohesionada y el equilibrio permanente de la sociedad.
Mientras la sociedad en conflicto, por el contrario presente al elemento humano como un ser activo y activante, en una sociedad que es en alto grado determinada por ella y a su vez él también la determina.
La sociedad bajo el enfoque de la teoría del conflicto se concibe como una unidad o totalidad permanente choque, donde se presenta el caso en que los miembros
No comparten los mismos intereses, sino por el contrario los intereses de un determinado grupo o sector dominado sobre los otros. Esta dominación va acompañada de burocracia, privilegios de unos pocos, explotación, miseria, corrupción y para mantener este estado de cosas, la legitimización a través de las fuerzas instituidas por dicho Estado.
Mantener esta dominación en un país como el nuestro y por consiguiente plagados los conflictos armados y de todo tipo, no es tarea fácil, especialmente después de casi 60 décadas de guerra intestina en busca de unos por el poder y de los otros por mantenerse.
El actual mandatario habla de una paz total, término que ha sido fuertemente criticado por los detractores de este nuevo gobierno, pues han sido más de dos siglos de vida republicana, gobernado por los partidos tradicionales y envuelto en profundas crisis sociales y económicas, se considera no es ni será tarea fácil tratar con esta sociedad colombiana en conflicto. Se le abona al actual mandatario su compromiso por llegar a una paz duradera y que finalmente pueda cesar la horrible noche y entender o comprender de una vez por toda las palabras del que murió en la cruz.
Como es de anotar, la sociedad en permanente conflicto trata por todos los medios de mantenerse, aunque haya un desequilibrio permanente debido a las mismas contradicciones propias del sistema imperante, cuya base será siempre la coacción ejercida por algunos de sus miembros sobre otros, y los resultados no se hacen esperar: la sociedad en constante conflicto.