Pablo Milanés y la Nueva Trova Cubana

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Escrito por:

José Vanegas Mejía

José Vanegas Mejía

Columna: Acotaciones de los Viernes

e-mail: jose.vanegasmejia@yahoo.es



Como les ocurre a los personajes que trascienden en el tiempo, la tumba de Pablo Milanés se ha cerrado pero su influencia en la cultura latinoamericana y universal gravitará por mucho tiempo, sobre todo por la innegable importancia de su legado. En efecto, la Nueva Trova Cubana ―de la que hablaremos más adelante― es un valioso aporte que nos ha dejado este músico recientemente fallecido.

     Pablo Milanés nació en Bayamo, Cuba, el 24 de febrero de 1943. Estudió música en el Conservatorio Municipal de La Habana. Inició su carrera profesional cuando tenía dieciséis años; a los veintiuno integró el cuarteto “Los Bucaneros”. Fue cantautor, cantante y guitarrista. Comenzó a crear canciones de contenido político en 1967, bajo el influjo del Primer Encuentro Internacional de la Canción Protesta, celebrado en Varadero, Cuba. En 1968 ofreció su primer concierto con Silvio Rodríguez en la Casa de las Américas. Allí nació el movimiento musical popular de la Nueva Trova. En esa época pasaron por la Casa de las Américas otros exponentes de la protesta social: Violeta Parra, Mercedes Sosa, Daniel Viglietti, Chico Buarque, Simone Vinicius, Milton Nascimento y Víctor Jara, entre otros.

     Son numerosas las canciones de Pablo Milanés, unas de su autoría y otras solo interpretadas por el trovador. Como solista se desempeñó en conciertos con “Versos sencillos”, de José Martí; “Canto a Nicolás Guillén”, “La vida no vale nada”, “El pregón de las flores”, “Yo me quedo”, “Querido Pablo”, “Buenos días, América”, “Líneas paralelas”, “Mi Habana”, y muchas más. También son suyas “Yolanda”, “Cuánto gané, cuánto perdí” y “El breve espacio en que no estás”. En colaboración con otros cantantes, Milanés interpretó, entre otras composiciones “Canción protesta”, “La canción, un arma de la Revolución”, “Piero & Pablo”, “Éxitos de la Nueva Trova”, “Neruda en el corazón”, “A Chabuca”, “Cuba le canta a Serrat”, “Cuba le canta a Sabina”.

     La alianza de Pablo Milanés con Silvio Rodríguez data de la década de los 70. Cantaron “Cuando digo futuro” en 1977, “Tríptico” en 1984, “Oh, melancolía” en 1987 y “Memorias” en 1987. Acompañado por Joaquín Sabina, el cantautor cubano interpretó “Esta boca es mía”, “Postal de La Habana”, “Diario de un peatón”. Con Joan Manuel Serrat, “Antología desordenada”. Por su música en la película “Un señor muy viejo con unas alas enormes”, basada en un cuento de García Márquez, Pablo Milanés recibió un premio en 1988. Además, en el 2005 fue galardonado con el Premio Nacional de Música de Cuba y en el 2006 y el 2015 obtuvo sendos premios Grammy.

     La Nueva Trova Cubana es un movimiento dentro de la música de la Isla. Emergió en los años 60 con el establecimiento de la Revolución Cubana. Tuvo sus raíces en la trova tradicional pero su contenido es político. Combinó música popular con textos llamados ‘progresistas’. Para esta fusión, Milanés tuvo en cuenta el “feeling”, estilo musical que en la década de los 40 estuvo de moda en Cuba; se acompañaba con una guitarra, a la usanza de los viejos trovadores. Era una combinación de canción romántica y jazz norteamericano, lo que lograba conectar al intérprete con el público.

     En los últimos años Pablo Milanés se convirtió en una de las figuras de la música cubana que más criticó al régimen de su país, sobre todo por la represión contra disidentes políticos. Fue defensor de la Revolución Cubana pero no se abstuvo de señalar los errores cometidos por el régimen. 

     Pablo Milanés perteneció al Grupo de Experimentación Sonora (GES) desde su fundación, en 1967, hasta sus últimas presentaciones. Con la formación de este grupo se integraron al mismo numerosos jóvenes creadores que favorecieron el proceso revolucionario de Cuba. Desde el comienzo estuvieron allí Silvio Rodríguez, Pablo Milanés, Leo Brouwer, Noel Nicola, Eduardo Ramos, Sergio Vitier y Leonardo Acosta. El 21 de noviembre del 2022, en Madrid, el cantautor cubano calló su voz para siempre. Desde 1973 se hablaba de los tres grandes Pablos, fallecidos ese año: Pablo Picasso, Pablo Casals y Pablo Neruda. Hoy tenemos que agregar a esa galería de la cultura universal, con gran pesar, el nombre de Pablo Milanés. Paz en su tumba.



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