Celebraciones y creencias diferentes, pero todos mantienen un solo objetivo: cultivar la Fe desde otras perspectivas.
Por: Yomarid Escorcia Manjarrés
Redacción EL INFORMADOR
La llegada de un nuevo año es el momento ideal para agradecer a Dios y a la vida, por nuevos comienzos y la oportunidad perfecta para trazar nuevas metas a tu vida; sin embargo, no todos los seres humanos disfrutan de estas fechas de las mismas formas, especialmente, cuando hacen parte de una congregación o religión diferente a la Fe Católica. 
Religión católica
En Colombia, el catolicismo es la religión con mayor número de creyentes, razón por la cual muchos participan de esta celebración por medio de diferentes actividades que permiten aumentar más la fe. Como primera medida, los feligreses acuden a la Santa Misa, con el propósito de agradecer al Todopoderoso por la llegada de un nuevo año.
Frente a las distintas creencias que tienen algunos católicos, el sacerdote Mario Arroyo, quien tiene un canal de Youtube denominado ‘Teología para Millenials’, indicó que no se debe caer en supersticiones y rituales, pues “no es cristiano” actuar así. Es suficiente implorar la protección de Dios Nuestro Señor, bajo el amparo de Nuestra Madre, Santa María”.
Le puede interesar: Católicos celebran desde hoy el inicio de la Novena de Navidad
Asimismo, recomendó que “deben hacer un examen de conciencia del año que termina para darle gracias a Dios por tantas cosas buenas, para pedirle perdón a Dios también por las cosas que no hayamos sabido hacer bien o que podríamos haber hecho mejor y para poderle también dar gracias el año entrante, y pedirle ayuda de forma que el nuevo año lo vivamos mejor de lo que hemos vivido este”, dijo.
Para Cindy, la celebración de Fin de Año es una oportunidad para agradecer a Dios por todo lo vivido.
En entrevista con EL INFORMADOR, Cindy Buenahora, quien es servidora en la iglesia La Santa Cruz y miembro del grupo Emaús, indicó que “el 31 de diciembre la Iglesia Católica celebra San Silvestre; como familia católica y servidora de la Iglesia, vamos a la última eucaristía a las 6:00 de la tarde, en la parroquia de La Santa Cruz, que actualmente preside el padre Martin Egidio Hincapié Mira, yendo con el corazón dispuesto al encuentro con Dios, a escuchar su palabra y recibir la bendición del año nuevo”. 
Acto seguido, Buenahora indicó que “después de cumplir el compromiso con Dios, llegamos a la casa, oramos por nuestro hogar y comemos en la mesa que armamos para la fecha. Siempre ponemos el pan que simboliza la vida y la unión con Jesús. Por último, aseguro mis granos para la prosperidad “, puntualizó Cindy Buenahora.
En diálogo con esta casa periodística, Buenahora explicó las actividades que realiza minutos antes de la medianoche. “Antes de las 12:00, enciendo en mi altar una vela a la Virgen y al Señor, para darle las gracias por la vida y todas las bendiciones que recibimos. Por último, después del ‘pito’, nos abrazamos y nuevamente oramos y pedimos al Señor por nuestros sueños y anhelos en el nuevo año para que mamita María interceda ante su hijo amado y nos los conceda”, mencionó. 
Con la celebración de una Santa Misa, la Iglesia Católica conmemora la llegada del nuevo año.
Religión Evangélica
A diferencia de los católicos, los cristianos no son partidarios de las celebraciones en estas fechas; para ellos, esa tradición no está escrita en la Biblia. De acuerdo con sus creencias, el primer mes del año ocurre entre marzo y abril. Pero, para honrar a Dios por todo lo vivido realizan un servicio evangélico y a través de prédicas y alabanzas, conmemoran la fecha. Posteriormente, se dirigen a sus residencias y comparten con los familiares sin música, ni agüeros. Así le contó Nohemí Cárdenas a esta Casa Periodística, quien habló sobre las actividades que realizan el 31 de diciembre en la Iglesia Pentecostal Unida de Colombia. “Generalmente, nosotros no celebramos está fecha porque eso no aparece escrito en la Biblia; de hecho, no preparamos una cena como tal porque eso hace parte de la tradición católica, pero últimamente algunas familias han optado por hacerlo aparte”, expresó Cárdenas.
También ñe puede interesar: Cristianos, una minoría en riesgo de extinción en la tierra de Jesús
Asimismo, agregó que “desde nuestra posición realizamos un servicio en la iglesia y lo denominamos ‘Acción de Gracias’, y tomamos la Santa Cena, que es un vaso de vino, con un pedazo de pan para poder recibir el cuerpo de Cristo. Eso es lo que hacemos cada 31 de diciembre y al finalizar cada uno se va con su familia”.
Por último, agregó que “para este año, nosotros vamos hacer algo diferente. Hemos decidido viajar a reencontrarnos con unos familiares y vamos a preparar una cena especial para ese momento. Sin embargo, dedicaremos un espacio para orar y agradecer a Dios por todo lo vivido en estos meses”.
Judaísmo
La celebración navideña coincide con el Hanukkah o Janucá de los judíos, aunque no tengan relación alguna. La fiesta empieza el 23 de diciembre en la noche y se extiende durante ocho días en los que se recuerda la derrota de los helenos y la recuperación de la independencia de los judíos.
Según la historia, para esta fecha el judaísmo también entrega regalos durante los ocho días. Asimismo, recuerda el milagro del aceite y la reconstrucción del templo destruido por el Imperio Otamano.
Leer más: Belenes vivientes, una tradición que vuelve por Navidad
Para los judíos, el primer día del Hannuká se celebra una comida familiar y se intercambian regalos. Entre las comidas que suelen preparar los judíos en estas fechas destacan las de aceite frito, como pasteles de patata y buñuelos (que llaman sufganiot), una especie de rosca sin agujero en el medio y generalmente rellena de mermelada.
En diálogo con EL INFORMADOR, Manuel Rodríguez, quien vive en Tunja, Boyacá y desde hace muchos años hace parte del judaísmo, enfatizó que “desde que soy judío, no he vuelto a celebrar más estas fechas. De hecho, para nosotros la tradición más importante es el Yom Kipur, el día de la expiación. Es una celebración que se hace ocho días después de celebrar el inicio del año judío”. 
Los cristianos reciben el cuerpo de Cristo a través de la Santa Cena.