Campesinos de Sitionuevo protestaron por negligencia del gobernador ante estragos de ola invernal

Los líderes de esa zona manifestaron que las fuertes precipitaciones dejan perdidas en el comercio y cultivos.

Departamento
Tamaño Letra
  • Smaller Small Medium Big Bigger


Los manifestantes se apostaron a las afueras de la administración departamental para exigir mayores acciones ante las afectaciones que les ha dejado el fenómeno natural.

Con pitos, pancartas y arengas, decenas de campesinos del municipio de Sitionuevo se hicieron sentir en la mañana de este jueves en la puerta de la Gobernación del Magdalena, donde llegaron para protestar contra la negligencia por parte de la administración departamental ante los estragos que ha dejado la cruda ola invernal en el departamento.

Los líderes de esa zona manifestaron que las fuertes precipitaciones dejan perdidas en el comercio y cultivos. Razón por la que alzaron su voz y pidieron proyectos de inversión que mejoren sus condiciones de vida
Entre las quejas expuestas por los protestantes se encuentran el mal estado de las vías, lo cual impide que el transporte de vehículos de carga de alimentos puedan distribuir productos como yuca, berenjena, maíz, entre otros ocasionando millonarias pérdidas.



“La mayor problemática es que no tenemos vías para sacar nuestros productos de las fincas, pues las terciarias se encuentran en muy mal estado. Hay que hacerlo en moto o caballo hasta el pueblo y ahí venderlo por un valor más bajo”, recalcó una de las líderes de los comerciantes.

Le puede interesar: Asamblea da luz verde a Caicedo para gastar más de 200 mil millones el próximo año

Asimismo, los manifestantes expusieron que la atención por las lluvias ha sido poca por parte de la administración local y departamental, denunciando que las calles se encuentran inundadas y las aguas estancadas están enfermando a los niños.

Hay que recordar que el campesinado del Magdalena ha sido sin duda alguna el sector más afectado con la ola invernal. Las fuertes lluvias han arrasado con innumerables hectáreas de cultivos, obligando a los pequeños y medianos productores a deshacerse de los alimentos.

Los municipios ribereños, además de las precipitaciones han sufrido también el desbordamiento del río Magdalena, que ha acabado con sus enseres y animales.




Más Noticias de esta sección

Publicidad