‘Yeyo’:el inmortal de los Palacio

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Si alguien se dedica a escribir sobre la grandeza de la familia Palacio en el fútbol, tendrá que tomar necesariamente como marco de referencia a Aurelio Alberto Palacio Yánez, en virtud a que fue el primer exponente de esta vena futbolística, que más tarde se constituiría en un apellido dinástico, por la entrega de jugadores con altas habilidades deportivas que enaltecieron al fútbol samario, del Magdalena, Colombia y si me empujan del mundo, durante las décadas de los sesenta, setenta, ochenta y parte del 90.

El segundo representante de esta notable familia deportiva en aparecer fue Justo, hermano de Aurelio, para honrar con su técnica como defensor central a esta estirpe. Seguidamente los Gonzales Palacio, con Edison- padre e hijo-, Julián y Miguel, quienes por vía materna se constituyeron en excelentes continuadores de este significativo apellido. Tiempo después, Alán, "El Pibe" y Ronald, le pondrían moña dorada a esta vena deportiva e incluso, Carlos "El Pibe" Valderrama Palacio, le daría el punto de oro a la i, de los Palacio, con su maravilloso estilo de juego.

Este apellido lo posiciona en el fútbol samario, Aurelio, porque su padre Justo Pastor Palacio Zúñiga (q.e.p.d.) no practicó fútbol de tal forma, que en el pasado inmediato de su descendencia nadie sobresalió en este deporte; porque su padre por ejemplo, fue un marinero guajiro entregado de cuerpo y alma a las olas y los vientos del mar Caribe. Los cromosomas del fútbol le vienen entonces, por la vía materna, luego de que la autora de sus días Celedonia Yánez, (q.e.p.d.) traía consigo el adn del fútbol, como quiera que Aníbal "El pollo Yanez", estelar jugador de la selección Magdalena, que marcó un hito con el título Nacional en 1928 en la ciudad de Cali. "Yeyo" nació un 15 de febrero de 1945, en nuestra ciudad, con un balón enredado en el cordón umblical, por los genes futbolísticos de los Yánez y de su padre heredó el temperamento para convertirse en el primer botón de muestra futbolística de los Palacios.

Inicios.

El primer capítulo del libro del fútbol, lo comienza a escribir en el equipo Ferrotalleres de "Jaricho Valderrama" en la Kra. 2ª entre las calles 6 y 9 del barrio "Pescaito", en la década del 50. Sus potencialidades futbolísticas le permitieron hacer parte de los mejores equipos de la liga departamental como Termarit y el River, entre otros. Tiempo después y gracias a sus cualidades deportivas, es llamado por el entrenador Andrés "Bolón" Acosta, para integrar la selección Magdalena que participó en el Torneo Nacional de Girardot en 1963 y al año siguiente en Ibagué, en ese certamen, Magdalena fue subcampeón, tras ser derrotado por el equipo local, Tolima uno por cero.

De este combinado departamental, además de "Yeyo", se recuerdan a grandes jugadores como Jaime Deluque, "Joche" Vargas, "Mañe" Manjarrés, Hermenegildo Segrega, Wilson Garcés, entre otras figuras. Aurelio Palacio, para cerrar su página gloriosa con las selecciones departamentales, integra el equipo que en 1965, obtendría el título Nacional en Barranquilla.

Unión Magdalena.

Entra al fútbol profesional, con un nombre y un apellido ganado con lujo de detalles en las difíciles arenas del fútbol aficionado, de tal forma que no llegó como uno más, sino por el contrario, entra un jugador con unos altos niveles de competencia, para afrontar el reto del exigente fútbol profesional. Más temprano que tarde comienza a figurar en la titular del Unión Magdalena 1966, al lado de Pedro Vásquez, Iván Ponzón, Pablo Hugueth, Osvaldo "Chicho" Terra Moreno y los brasileros "Quarentihña", Jailton, Wargner Rodríquez Braga, Iris de Brito, coronel, Concalvez. Al lado de esas figuras, "Yeyo", de entrada fue jugador importante del Unión , con el apoyo de Santos Cristo, que dirigía al equipo samario por aquellas calendas. En el 67, este entrenador es destituido y llega en su reemplazo, el paraguayo Aurelio González y al lado de "Toto" Valderrama, inician el proceso que desembocaría felizmente, en el titulo del Unión en el histórico año del 68.

El suceso trascendental de "Yeyo" con el equipo samario, sin lugar a equívocos, fue el gol de 45 metros que le anotara la inolvidable noche del 12 de diciembre de 1968, a Rosendo Toledo, portero del Deportivo Cali al minuto 13 de la etapa inicial, en el partido de ida de la final del campeonato. Esa noche, "Yeyo" escribió su nombre y apellido con letras doradas y en alto relieve en la historia del onceno samario ante el Cali y más aún, cuando el equipo samario empata a dos goles aquí en Santa Marta, con el equipo azucarero el 19 de diciembre y se corona campeón. A partir de ese momento, el apellido Palacio, vivirá para siempre en la memoria y en el corazón de los aficionados del " Ciclón", hasta el final de los tiempos. Jugó 337 partidos con el Unión, marcó 8 goles, desde 1967 hasta 1974. Un partido y un gol, lo inmortalizaron con el equipo samario.

Volvió al colegio.

Suspendió los estudios para dedicarse por completo al fútbol. Después al colgar los guayos como jugador y las sudaderas como entrenador, descolgó los libros para terminar con éxito su bachillerato en la jornada nocturna del Liceo del Norte. Ahora va a la Universidad por la Licenciatura en educación física. Ahora tiene como meta estudiar licenciatura en educación física, en la Universidad, seguramente que en poco tiempos tendremos a un profesional en esta disciplina, porque su vida está colmada de logros gracias, a la actitud positiva que asume cuando se traza un reto.

Aurelio Palacio Yanes, el precursor de la dinastía Palacio, escribió una sobresaliente vida deportiva que debe servir como ejemplo de superación a las generaciones del presente. "Yeyo", inmortalizó a los Palacio.

Colaborador: Profesor Alberto Camilo Blanco