En el municipio de Ciénaga, Magdalena, además de señalar a la empresa de energía y agua como responsable de las protestas; además involucran también a la alcaldía.
En la cuarta edición de Zona Crítica, la continuación de una serie de informes presentados por EL INFORMADOR, abordó la problemática que afecta a las comunidades localizadas sobre la carretera Troncal Del Caribe, vía Santa Marta-Barranquilla.
Siendo una situación de interés público ya que genera afectaciones en el transporte, viajeros, comercio, turismo y productores del Magdalena, se siguen evidenciando las falencias por parte de las administraciones locales a la hora de gestionar los recursos para resguardar la seguridad de los conductores que se ven perjudicados directamente por los altos trancones que se generan en la zona, debido a falta de operativos de regulación y vigilancia por parte de las autoridades.
En un acercamiento con las comunidades que bloquean el tránsito vehicular se determinó lo siguiente:
En diálogo con EL INFORMADOR Víctor Bolaño, representante de la Junta de Acción Comunal, señaló a la empresa prestadora del servicio de energía, Air-e, como el principal responsable de este tipo de acciones explicó que, “la empresa ha ofrecido un servicio deficiente; los altos costos no corresponden con el consumo real de las familias en esta área. Estamos agotados por las interrupciones prolongadas, que a menudo superan las ocho horas, ocasionando pérdidas económicas al dañar los electrodomésticos y afectar significativamente las ventas de nuestros productos, fundamental para el sustento de nuestras familias”.
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Alcaldía de Ciénaga
“El alcalde Luis Alberto Tete Samper no ha estado presente en las mesas de intervención, delegando esta responsabilidad al secretario de gobierno, Pedro Pablo Granados. Sin embargo, la presencia de Granados en estos compromisos ha sido escasa y su efectividad en cumplir con las demandas planteadas ha sido cuestionada”, señaló Bolaño.
A raíz de estas acusaciones, nos dirigimos a las autoridades locales de Ciénaga con el propósito de esclarecer las denuncias planteadas por los líderes comunales que han tomado medidas en las vías.
¿Y la autoridad principal de Puebloviejo?
El alcalde de Puebloviejo, por ejemplo, afirmó que, según su conocimiento, los residentes de su localidad no han realizado bloqueos viales en el transcurso del 2023, negándose a asumir responsabilidades sobre esta situación.
Al parecer, el burgomaestre Fabián David Obispo Borja, no tiene conocimiento de las veces que ha habido volcamiento de camiones sobre la vía ni mucho menos se ha enterado que la comunidad aprovecha para saquear el camión y llevarse las mercancías como ha ocurrido recientemente.
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El alcalde Obispo también se lavó las manos.
Los cierres afectan negativamente la actividad comercial entre los departamentos del Atlántico y Magdalena; los últimos datos refieren que durante el 2023 hubo más de 100 cierres de vía. 86 por protestas y 15 por accidentes.
Mientras las autoridades de los municipios de Ciénaga y Puebloviejo. se hacen los de la "vista gorda" con este problema, las comunidades siguen bloqueando la vía según les parece.
El próximo lunes, continuaremos con más aspectos relevantes: ¿Que dice Air-e, la Gobernación y la Policía?
El promedio de duración de estos bloqueos es de ocho horas, además de generar pérdidas insostenibles en los sectores empresariales y turísticos de Santa Marta.
El motivo más recurrente de estos bloqueos fue la falta del fluido eléctrico y agua potable en los municipios.
La interrupción del tráfico en una vía importante puede tener consecuencias en la seguridad, ya que dificulta la movilización de servicios de emergencia, fuerzas de seguridad y personal médico en caso de necesidad.
Los problemas locales han tenido un efecto dominó en el gremio del turismo, provocando pérdidas en todo el departamento del Magdalena y afectando considerablemente esta industria. Resulta evidente que los pobladores no comprenden el impacto que genera el cierre de las vías en áreas como Ciénaga o Puebloviejo.
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La CIFRA
En un lapso de un año, aproximadamente 3,577,000 vehículos transitan por los peajes en la vía Santa Marta-Barranquilla. Sin embargo, la incidencia de bloqueos viales en esta ruta ha generado repercusiones económicas de magnitud impredecible para los diversos gremios en los departamentos del Magdalena y Atlántico. Las pérdidas económicas ocasionadas por estos bloqueos resultan incalculables, ya que varían significativamente en función de la duración y las circunstancias específicas que rodean cada cierre de la vía. Esta interrupción en el flujo normal de vehículos no solo afecta el comercio y la industria local, sino que también repercute en la logística, el turismo y otros sectores clave de la economía regional.
El caso del corregimiento de Palmor resalta como un ejemplo claro de la falta de acciones en la alcaldía, las dificultades en la prestación de servicios esenciales, tales como el suministro de agua y el estado precario de la infraestructura vial, han evidenciado la carencia de apoyo y la inacción del alcalde frente a estos problemas. Esta situación ha avivado un ambiente de insatisfacción entre los habitantes, quienes han optado por medidas de protesta, incluyendo el bloqueo de vías, como un medio de exigir atención inmediata y soluciones concretas a las urgentes necesidades que enfrentan.