La enfermedad del HLB (acrónimo de Huanglongbing) es considerada la de mayor impacto económico en la citricultura mundial y es una seria preocupación para el sector agrícola y, en especial, para los productores de cítricos del país
El HLB implica un debilitamiento severo de los cítricos. En Colombia el agente patogénico asociado a los síntomas de esta enfermedad es Candidatus Liberibacter asiaticus, una bacteria que tapona o degenera los vasos del floema de los tejidos de la planta, provocando síntomas semejantes a deficiencia nutricionales, pérdida de vigor y la muerte productiva y fisiológica del árbol en etapas más avanzadas de la enfermedad.
Al principio de la infección, los síntomas pueden observarse en una o pocas ramas sectorizadas en la planta. En las hojas puede observarse un moteado asimétrico, que es el síntoma típico de la enfermedad, el cual se caracteriza por la presencia de áreas verdes y amarillas en la hoja.
Transmisión de la enfermedad
Esta enfermedad puede reducir notablemente la producción, la apariencia y el valor económico de los frutos y es transmitida en campo por un insecto vector conocido como psílido asiático de los cítricos o Diaphorina Citri, que la transmite desde árboles enfermos a árboles sanos y a otros hospederos alternativos.
“El monitoreo del insecto vector es fundamental para la aplicación de medidas de control tanto químicas como biológicas, para esto es fundamental poder identificarlo en campo. Son insectos pequeños, el adulto mide aproximadamente de 3-4 mm de largo; alas moteadas con tonos café y tiene como característica especial la posición en ángulo de 45 grados que toma para alimentarse”, explica Lumey Pérez Artiles, investigadora del Centro de Investigación Caribia de Corpoica. Las pérdidas debidas a la enfermedad son elevadas y los daños son más severos en plantaciones jóvenes, en las que puede ocurrir la muerte económica de las plantas incluso antes de que comiencen a producir, por lo que se pierde la inversión inicial del cultivo.
Una enfermedad sin cura
“Como la enfermedad no tiene cura y afecta a todas las especies cítricas, el manejo de HLB es preventivo, complejo y muy costoso”, asegura Pérez Artiles, quien además señala que “se requiere de estrategias que incluyan el uso de material de propagación certificado, la eliminación de las plantas que presenten la bacteria y uso de insecticidas químicos y biológicos para controlar el insecto vector en los viveros y plantaciones y en otras plantas hospedantes”.
Por esta variedad de factores se hace difícil el diseño de las estrategias de manejo efectivas y “para ser cada vez más eficiente en este manejo se requieren de estudios encaminados al diagnóstico de la enfermedad, diferentes métodos de control del insecto vector, estudios epidemiológicos que permitan definir la evolución de la enfermedad en áreas citrícolas, entre otros”, agrega. Recomendaciones para los productores
Para el manejo de la enfermedad, la investigadora de Corpoica recomienda que se hagan prospecciones periódicas en las áreas citrícolas comerciales para la detección y eliminación de las plantas con síntomas asociados a la enfermedad; monitoreo y control de las poblaciones del vector Diaphorina Citri; establecimiento de las plantaciones con material de propagación certificado; eliminación de plantaciones abandonadas; eliminación de hospedantes alternativos del vector y siembras en bloques alejados de plantaciones enfermas; favorecer los cambios tecnológicos que conduzcan a plantaciones que entren rápidamente en producción y capacitación del personal técnico y monitores.
Así se reconoce un árbol enfermo
Así se reconoce un árbol enfermoSegún la experta cubana la enfermedad de HLB, que hoy tiene en alerta a citricultores y a la comunidad científica del país, se reconoce por síntomas como:
1. Hojas con manchas amarillas y verdes asimétricas
2. Caída prematura de los frutos
3. Árbol debilitado, caída de las hojas y muerte
4. Engrosamiento de las venas de las hojas con aspecto corchoso
5. Frutos mal formados y con poco jugo
Cifras
El área sembrada de cítricos en Colombia es de aproximadamente 90 mil hectáreas ubicados principalmente en Tolima, el Eje Cafetero, Santander, Norte de Santander, el Huila y Antioquia, con una producción anual de 1,2 millones de toneladas. Este cultivo genera aproximadamente 413 mil empleos de manera directa e indirecta, según Asohofrucol.
