Los trenes estarán operativos en tres años y podrán ser utilizados en el futuro proyecto Tren del Río.
A pesar de que el Metro de Medellín consideró la opción de cofinanciar la compra de 13 trenes nuevos con recursos del Gobierno Nacional, la Alcaldía de Medellín y la Gobernación de Antioquia confirmaron que serán ellas las encargadas de proporcionar los fondos para su adquisición.
Con una inversión de 554.989 millones de pesos a precios constantes de 2023, ambas entidades formalizaron un acuerdo para aumentar la capacidad de la red de transporte masivo del Valle de Aburrá. Desde Metro señalaron que los nuevos trenes, cada uno con tres vagones, mejorarán los tiempos de viaje y contribuirán a la reducción de emisiones en la ciudad.
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"El trabajo en equipo trae buenos resultados y va mucho más allá de las buenas relaciones que tenemos directamente el gobernador y yo. Esto se traduce ya en proyectos. La semana pasada tomamos la decisión de aportar, de manera conjunta, al proyecto según porcentajes determinados", dijo el alcalde Federico Gutiérrez.
Durante un año de operación, se prevé que los vehículos ferroviarios ahorren 50.563 toneladas de CO2, eviten 1.051 problemas de salud, reduzcan 2.190 casos de accidentes de tráfico y ahorren 21 millones de horas en desplazamiento para los usuarios. Además, se espera que faciliten la movilización de 57 millones de pasajeros adicionales.
Los beneficios para los pasajeros y la ciudad se estiman en 217.059 millones de pesos. "Es casi equivalente a lo que cada uno de nosotros va a poner, lo que significa que este proyecto se recupera prácticamente en tres años", comentó Tomás Elejalde, gerente de la empresa.
"Una de las bondades de este proyecto es que nos permite ampliar la capacidad de la línea existente, que será la última fase de expansión para movilizar a todos los pasajeros del Valle de Aburrá", expresó el gobernador Andrés Julián Rendón.
Las entidades planean avanzar en todos los requisitos técnicos y legales en los próximos meses para solicitar los trenes a finales de este año y que lleguen a la ciudad a principios de 2027 con una puesta en funcionamiento gradual.
La idea es que el material rodante pueda ser ensamblado en la 'fábrica de trenes' de los talleres del Metro de Medellín, ubicados en Bello. Allí, la empresa cuenta con el conocimiento y la experiencia necesarios para llevar a cabo esta labor, así como con el respaldo de empresas nacionales para desarrollar productos con estándares internacionales.
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"Vamos a tener un aprendizaje que nos permitirá constituirnos como un hub ferroviario que sea útil no solo a las expansiones del sistema o el Tren del Río, sino también a otros proyectos del país", agregó el mandatario departamental.
Los nuevos trenes, que estarán operativos en tres años y aumentarán la capacidad del sistema en un 18 por ciento, reducirán los tiempos de espera para los usuarios. Durante las horas pico, el tiempo de espera disminuirá de tres minutos a dos minutos y medio.
"Esto es un incremento importante de calidad y buen servicio", apuntó Tomás Elejalde, gerente de la empresa.
Además, en el futuro, estos trenes podrían ser utilizados en el proyecto Tren del Río, gracias a la interoperabilidad de la infraestructura férrea de las líneas A y B.
