A veces Dios se acuerda de Colombia

Columnas de Opinión
Tamaño Letra
  • Smaller Small Medium Big Bigger

Escrito por:

Germán Vives Franco

Germán Vives Franco

Columna: Opinión

e-mail: vivesg@yahoo.com



La semana pasada estuvo llena de eventos importantes para el país.  El fallo de la Corte de La Haya, la salida de la MinMinas Vélez y la instalación del Congreso.

La Corte Internacional de La haya negó las pretensiones de Nicaragua y falló a favor de Colombia. Aunque siempre es bueno tener un fallo que respalde el ejercicio de soberanía, la verdad es que si incluso el fallo hubiera sido adverso, Colombia se hubiera comportado igual.  Dos razones.  La primera es que ya Colombia no está obligada por los fallos de dicha corte. Segunda, los temas de derecho internacional se rigen más por hechos y el derecho del más fuerte.

Petro cínica y falazmente intentó ganar indulgencias con Ave Marías ajenas y reclamó la victoria como propia, y a su vez denigrando de los gobiernos anteriores.  Según él, el equipo que él designó, y que solo hizo los alegatos de conclusión, fue el que hizo la diferencia.  Afirmación descabellada, ya que las etapas procesales que son decisorias hace mucho tiempo se habían cerrado.  El alegato de conclusión es un resumen final donde se exponen los hechos y se citan las normas y pruebas y se le presentan al juez argumentos para que acoja favorablemente nuestra pretensión.  En el alegato final no se pueden alegar hechos nuevos ni pedir pruebas ni cambiar lo que está en contención.  El alegato final lo puede hacer hasta un estudiante de derecho con buen sentido común; a este punto es muy tarde para cambiar estrategia.  En cualquier caso, el fallo es un hecho relevante para el país. Preocupa que ahora Petro quiera sentarse a negociar con el dictador nicaragüense.  Esperemos que, en su locura, no termine por deshacer con la izquierda lo que hizo la derecha.

La salida de Vélez es una buenísima noticia para el país y para el sector de los hidrocarburos y minería.  Estoy seguro que nada muy bien y que sacó el mejor Icfes y todas esas cosas maravillosas que solo ven un amor de padre, pero en lo referente a la cartera que le fue asignada era una total incompetente y su paso por el ministerio le hizo mucho daño al sector y a las finanzas del país.  Era uno de los elementos que generaban preocupación en aquellos, analistas, que siguen la realidad del país y cuyas valoraciones de riesgo nos impactan.  Es hora de que un sector que genera el 40% de las exportaciones del país, y cuyos ingresos son necesarios para financiar la transición energética y muchas otras cosas, tenga al frente un experto conocedor del sector que trace una estrategia sensata que le de tranquilidad a propios y extraños.  Solo un insensato como Petro quiere matar la gallina de los huevos de oro para comprar una que ponga huevos de aire.  Los huevos equivocados.

La instalación de la nueva legislatura dejó a un Petro en cuidados intensivos. Pronunció un discurso que demostró desconexión total con la realidad; un discurso alucinante y alucinado en el que además reclama rendición de la oposición vía un acuerdo nacional.  La cosa comenzó mal porque fue incapaz de poner presidente de Senado y Cámara, y en el Senado le fue mal en las mesas directivas.  Esto podría ser el abrebocas de crónicas de un fracaso anunciado.  No parece que hay un congreso deseando rendirse y allanarle el camino a Petro y sus locuras.  Entre otras cosas, a la fecha no entiendo como la oposición podría converger con Petro.  Las diferencias son de valores y principios y estos no son negociables.  No es negociable el modelo económico ni el de estado.  Lo que sea que proponga Petro debe respetar esta camisa de fuerza, de lo contrario sus propuestas correrán con la misma suerte que el Titanic.