Los empresarios colombianos están pensando y haciendo fuerza para que en esta semana se apruebe la prórroga del Atpdea (preferencia arancelaria otorgada por E.U. a Colombia) hasta el 1 de julio, no es otra cosa que los productos colombianos entren allá con arancel 0.
Si no se aprueba dicha prórroga, sería un grande problema para los empresarios, no sólo tendrían que sacar de sus bolsillos millones de dólares, que en muchos casos no tienen, para pagar los impuestos por los bienes que ingresen al país norteamericano, y además, se pondrían en la cuerda floja negocios ya concretos y la obtención de nuevos.
Por ejemplo, en el sector de las confecciones, una sola empresa tendría que buscar 800.000 y un millón de dólares para pagar los aranceles que se exigen por las prendas de vestir vendidas en Estados Unidos.
“Es un problema de flujo de caja. Si me toca pagar esa plata, lo primero que tengo que hacer es salir a conseguirla porque no la tengo. Nosotros ya tenemos compromisos que no se pueden eludir, y hoy tengo paradas exportaciones marítimas a Estados Unidos esperando que pasa en el Congreso”, explicó Andrés Verdugo, gerente de la Comercializadora Internacional Jeans, quien mensualmente exporta unas 400.000 unidades a Norteamérica.
Es más, si se toman las exportaciones hechas entre enero y noviembre del año pasado en el sector de las confecciones y presumiendo que no hubiera tenido Atpdea, los empresarios habrían tenido que pagar cerca de 110 millones de dólares en aranceles.
La directora de la Cámara de la Cadena Algodón, Fibras, Textiles y Confecciones de la Andi, María del Mar Palau, advierte, que la situación para los exportadores a este país es crítica.
“puede haber riesgo en la perdida de negocios ya establecidos y consecución de nuevos por la inseguridad jurídica en el futuro de las preferencias”, concluyó.
El presidente de Inexmoda Carlos Eduardo Botero, expuso, que hay una gran incertidumbre, máximo cuando este sector se maneja pedidos y confecciones de seis y nueve meses. Es muy grave si no se aprueba la prórroga y adicionalmente, aunque se aprobara el TLC con Estados Unidos hoy, se tardarían varios meses, podría ser un año, para poder aplicarlo”, indicó Botero.
Ahora bien, muchos empresarios han manifestado, que es mejor tener las preferencias arancelarias, por lo menos, hasta el 1 de julio a no tener nada, otros creen que lo ideal, independientemente del Tratado de Libre Comercio, sería una prórroga del Atpdea de un año y medio o de dos años.
Lo cierto, es que dilatar por corto tiempo dichos beneficios, es una forma de los republicanos de obligar al Gobierno de Barack Obama, a tomar decisiones sobre el TLC, que están pendientes en este primer semestre.