Entre lágrimas, Mendieta recordó a varios de sus compañeros que murieron en cautiverio, como Luis Hernando Peña Bonilla, de quien dijo "tenía problemas psiquiátricos".
Bogotá (EFE).- Los políticos Alan Jara y Sigifredo López, al igual que el general en retiro de la Policía Luis Mendieta, que estuvieron varios años secuestrados por las Farc pidieron ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) que haya penas severas para los responsables de su cautiverio.
Así lo expresaron durante una sesión realizada por la JEP en Bogotá, donde el tribunal comenzó a recibir versiones de quienes fueron víctimas de secuestros cometidos por las Farc, ahora convertidas en partido político.
"Solicitamos que nos reparen a las víctimas. Esperamos que la JEP trabaje por las víctimas", dijo Mendieta, uno de los oficiales de más alto rango secuestrado por las Farc y quien duró en cautiverio casi 12 años.
El alto oficial aseguró que no puede perdonar el daño que le hicieron las Farc al secuestrarlo y pidió que las penas contra los responsables de esos secuestros "sean severas".
Mendieta fue secuestrado en noviembre de 1998 en una sangrienta toma perpetrada por casi 2.000 guerrilleros de las Farc a Mitú, capital del selvático departamento del Vaupés, en la que murieron 43 personas entre policías, militares y civiles, al tiempo que quedaron 47 heridos y 61 personas más fueron secuestradas.
El oficial recuperó la libertad en una operación militar en la que fue rescatado junto con tres compañeros de cautiverio en junio de 2010 en las selvas del departamento del Guaviare.
Entre lágrimas, Mendieta recordó a varios de sus compañeros que murieron en cautiverio, como Luis Hernando Peña Bonilla, de quien dijo "tenía problemas psiquiátricos".
"Un día salió Peña al 'chonto', que era el hueco en la tierra donde se hacían las necesidades fisiológicas, y en ese sitio alias 'Patequeso' le puso la pistola en la cabeza y le dijo: 'Este el tratamiento psiquiátrico que damos en la guerrilla'", relató.
Añadió que "el sufrimiento era bien duro" porque "el trato fue inhumano" y sin atención médica.
Por su parte, el exgobernador del departamento del Meta Alan Jara se quejó de que mientras estuvo secuestrado "lo humanitario no se consideró durante años".
