Bernardo ‘Ñoño’ Elías busca tumbar el llamado a juicio

Judiciales - Nacional
Tamaño Letra
  • Smaller Small Medium Big Bigger


El dirigente político fue acusado el pasado 10 de mayo por los delitos de concierto para delinquir agravado y lavado de activos.

Con un recurso que será sustentado el próximo martes, la defensa del senador suspendido del Partido de la U, Bernardo Miguel Elías Vidal, conocido como ‘Ñoño Elías’, busca tumbar la decisión de la Corte Suprema de Justicia de llamarlo a juicio por el escándalo de sobornos pagados por la multinacional Odebrecht para quedarse con varios contratos de infraestructura vial del país.  El senador Elías Vidal ya fue condenado, tras aceptar cargos, a una pena de seis años y ocho meses de prisión por cohecho y tráfico de influencias, relacionados con el mismo entramado criminal.

Elías fue llamado a juicio el pasado 10 de mayo como presunto coautor de los delitos de concierto para delinquir agravado y lavado de activos, por supuestamente hacer parte de un grupo de funcionarios que se aliaron con Odebrecht para actuar ilegalmente. Sus acciones, dijo la Corte, habrían ido más allá de la “venta” de la gestión como congresista, para actuar en el diseño y ejecución del blanqueo de capitales, ocultando y borrando el origen y destino ilícitos de los dineros dedicados a pagar millonarias coimas.

La defensa del Senador Elías Vidal, que adelanta la abogada Silvia Rugeles, anunció a la Corte que el próximo martes a las 8 de la mañana presentará un recurso de reposición y, además, otro de apelación, para que la Sala reevalué los argumentos que tomó al momento de llamar a juicio al dirigente político. Cabe recordar que para la Corte, Ñoño Elías habría hecho gestiones para “ocultar el origen y destino del dinero producto de su intervención en la adjudicación ilegal de contratos y prerrogativas de Odebrecht”.

El alto tribunal destacó que las maniobras para lavar dinero de esta “organización criminal” se cumplieron a cabalidad, pues Odebrecht, con el objetivo de no levantar sospecha, se aseguraba de que ninguno de los pagos superaran los US$500.000. También tenían en cuenta que antes de realizar los desembolsos, la oficina de Operaciones Estructuradas –dependencia creada en Odebrecht para despachar las jugosas coimas– verificaba quiénes eran los titulares de las cuentas bancarias. Todo esto, según la Corte, para era comprobar que no fueran personas públicas.