Borrell añadió que el problema no solo afectaría a España, sino también a los países del norte de África como Argelia y Marruecos.
El ministro español de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, advirtió que si los inmigrantes que hasta el momento han viajado a Italia se desviaran hacia España, este último país tendría "problemas".
"Nosotros hemos expresado nuestra preocupación porque, naturalmente, si los 200.000 emigrantes al año, en números redondos, que Italia recibió se desplazasen en la misma cantidad y al mismo ritmo hacia el Mediterráneo occidental, tendríamos problemas", explicó en una rueda de prensa durante la reunión de titulares de Exteriores de la Unión Europea (UE) que se celebra hoy en Bruselas.
Borrell añadió que el problema no solo afectaría a España, sino también a los países del norte de África como Argelia y Marruecos.
Reconoció que Italia, cuyo Gobierno forman el populista Movimiento 5 Estrellas y la ultraderechista Liga, se encuentra "muy satisfecha" porque este año el flujo de inmigrantes ha caído "prácticamente un 90 % frente al pico de hace dos años".
"Pero nosotros estamos creciendo y, naturalmente, lo que pasa no es que los flujos de inmigrantes se hayan detenido, sino que han cambiado de ruta como, por otra parte, era de temer", comentó.
Borrell dijo que el intercambio de opiniones sobre la cuestión migratoria entre los ministros fue "vivo" y que Austria, país encargado de presidir el Consejo de la UE este semestre y cuyo gobierno está formado por conservadores y el ultraderechista Partido de la Libertad (FPOE), presentó su posición, favorable a sellar las fronteras norte y sur de Libia.
"Tiene su lógica. Si usted no quiere que embarquen, no deje que lleguen a la costa", ilustró, para después señalar que España ya evitó "de manera muy eficaz" que el flujo saliera del origen en el caso de Senegal, si bien admitió que en ese caso la vía de salida era marítima, al contrario que el sur de Libia.
De hecho, advirtió de las dificultades para controlar una frontera situada en el desierto.
Preguntado por las informaciones publicadas en diarios como "El País", que indican que el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) empleo durante la presidencia de José Luis Rodríguez Zapatero fondos reservados para evitar la llegada de inmigrantes irregulares a Canarias desde Senegal o Mauritania, el ministro aseguró que no tenía información adicional y que él entonces no formaba parte del Ejecutivo.
