Para llegar al corregimiento de San José del Purgatorio, hay que pasar por San Antonio del Rio, El Carmen del Magdalena,
Los Pozos y Veladeros, a través de una vía de herradura que se convierte en una completa odisea para sus residentes y visitantes, por lo intransitable y la poca atención que le ha prestado la administración de Plato Magdalena, en mejorar las condiciones de vida.
San José de Purgatorio, es una población de aproximadamente mil habitantes, que está completamente olvidada en materia de electrificación, puesto de salud, centro educativo, agua potable, un buen cementerio, y vías que ayuden a salir del atraso en que se encuentra desde hace varias décadas.
Durante un recorrido por toda la población, EL INFORMADOR logró conocer las dificultades por la cual viene atravesando, a pesar de ser uno de los corregimientos de mayor fortín de votantes durante los procesos electorales.
Según el señor César Rodríguez Alean, ganadero de profesión, fue enfático en manifestar que uno de los problemas, es la falta de una franja de terreno para reubicar a varias familias que durante la ola invernal perdieron todo, la cual comprende el sector de 'La Popa', donde solamente falta la buena voluntad del señor alcalde Jaime Peña Peñaranda.
"El señor alcalde en varias reuniones siempre nos entrega un plazo, que a hora sí, que la otra semana, pero es puro amague. Afortunadamente en nuestra población contamos con los dirigentes cívicos, que en invierno y verano están con nosotros como Richard y Valdomiro, quienes a cualquier hora están disponibles para realizar alguna diligencia en beneficio de la comunidad, la cual hemos logrado conseguir, varias obras, expresó César Rodríguez.
A su turno, el señor Julio César Torres Ataín, dijo que otro de los problemas que padece su población es la falta de un colegio de bachillerato y el nombramiento de un inspector de Policía, ya que últimamente se han registrado robos de cerdos y chivos, que logran criar con trabajo y sacrificio.
Para el presidente de la Junta de Acción Comunal, Emerson Marriaga Acuña, entre las necesidades está la falta de un puesto de salud, una cancha de fútbol, un acueducto para abastecer a toda la población, que solamente le hace falta una turbina y los tubos de conducción, siendo un pueblo rico en agricultura y pesca. "En nuestra población, una carga de agua potable tiene un valor de 700 pesos, a pesar de estar a un metro del rio Magdalena. Anteriormente, cuando funcionaba el acueducto nos tocaba cancelar 1.000 pesos por el recibo del consumo del agua, pero hoy en día una familia se gasta hasta 4.000 mil pesos diarios, para poder tener el poquito de agua", expresó.
Emerson dice que diariamente se observa un abandono total por la clase dirigente de Plato. "Afortunadamente, en nuestra población contamos con los hermanos Vera Polanco, dos dirigentes cívicos, que lo poco que hemos logrado, se lo debemos a ellos, sostuvo el dirigente comunal.
Igualmente, dijo Marriaga Acuña, que el puesto de salud, donde cada mes lo visita un solo médico, no tiene un baño adecuado, está sin sillas, escritorios, abanicos y energía.
Para Richard y Valdomiro Vera Polanco, a pesar de no contar con una credencial de concejal o diputado, son muchas las obras que han logrado conseguir como dirigentes cívicos de la población, como la electrificación de las veredas de las zonas del rio, como Viagual y Cuatro Vientos.
Igualmente, por intermedio del Banco Agrario, se gestionó un préstamo para el sector pesquero y agricultura, y el mejoramiento de viviendas. Además de conseguir el pago del subsidio a los agricultores, que en la pasada ola invernal perdieron todos sus cultivos.
Por Emilio Paipa Zárate - Corresponsal de EL INFORMADOR
