Hace dos meses se inauguró la obra, uno de los proyectos de infraestructura más importantes en la historia de Santa Marta que lamentablemente comienza a ser relegado.
Por: Vicky Cianci
Redacción EL INFORMADOR
De principio a fin el sendero peatonal del Ziruma es un trabajo arquitectónico que por un lado fomenta la actividad física en la población, y por otro, brinda a los residentes y turistas una vista del paisaje maravilloso de Santa Marta.
Falta de supervisión
En el camino se encuentran con frecuencia excrementos de perros; no solo de perros callejeros, sino de los que los usuarios sacan a pasear por el sendero. Este aspecto, que debería estar regulado por las autoridades, puesto que se trata de una zona deportiva y no debería ser utilizada para el paseo de mascotas.
Jardines y árboles sin podar
En del diseño ornamental están contempladas las jardineras, las cuales se notan que están descuidadas. Aunque las plantas no requieren mucha humedad, sí debe hacérsele riego esporádico.
La Unidad de Embellecimiento y Mantenimiento de Árboles (UME), a cargo de Jaime Avendaño, debe ir programando la jornada de poda y riego del sendero peatonal del Ziruma, ya que las ramas de árboles como el de Trupillo han empezado a invadir parte de la ruta deportiva.
Sin señalización
Muchas personas acostumbran a usar el sendero yendo en grupos, ocupando todo el ancho de la vía; lo que presenta molestias con los usuarios que vienen en sentido contrario. Sería conveniente que se intale una señalización que indique que siempre se debe caminar a la derecha para evitar este tipo de contratiempos.
A raíz de la invasión del carril contrario en el sendero, los usuarios han empezado a usar camisetas blancas con letras negras que dicen “Mantén tu derecha”.
El sendero fue inaugurado, pero existen aún detalles por definir, tales como la señalización, y a quien le corresponde encargarse del mantenimiento del sendero, para que esta obra no termine siendo una plata tirada a la basura.
Parqueo
Al inicio del sendero del Ziruma se ha dejado un espacio para parqueadero en el que apenas caben cuatro carros. Lo anterior ocasiona que en la vía, al lado del Batallón, se empiecen a estacionar los vehículos, formando filas interminables y lo hacen sobre la berma de seguridad, que debe estar despejada.
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En el mismo sentido, las personas que bajan y suben del sendero, se encuentran de un momento a otro con el tráfico vehicular, que representa peligro. Habría entonces que ampliarlo más para que el descenso fuera totalmente seguro.
Llamado a las autoridades
El llamado es para que las autoridades no dejen decaer las obras en las que se invierten los recursos de los ciudadanos y grandes contribuyentes; el cuidado y mantenimiento del mismo es responsabilidad directa de la Alcaldía; quien debe designar a los guardianes del sendero.
