Lo bueno
El rescate del escenario central de la Fiesta del Mar, el centro histórico y la Bahía de Santa Marta son el epicentro de todas las festividades públicas y gratuitas para los samarios y turistas que por estos días disfrutan de la programación cultural, artística y deportiva que está en el marco de la programación de la versión 56 de esta festividad.
Lo regular
En el desarrollo de las pruebas náuticas faltó mayor control y delimitación de la zona donde las candidatas realizaron el recorrido, puesto que en la zona de playa muchos bañistas se encontraban en el mar además de la presencia de lanchas particulares en medio del trayecto que hicieron las aspirantes. Otro aspecto que llamó la atención fue la falta de una carpa de primeros auxilios, aunque se contó con la presencia de personal de la Defensa Civil, no hubo un punto en el cual se pudiera atender de manera adecuada en caso de algún accidente de las participantes o de los miembros, como fue el caso de la representante de Cundinamarca cuando salió golpeada de su prueba, tuvo que ser cargada a brazo por falta de una camilla.
Lo malo
La mala organización de la Fiesta del Mar se notó desde la ‘serenata’ que no tuvo Santa Marta, extrañados los samarios se quedaron esperando la tan anunciada serenata para la ciudad, puesto que no hubo mariachis ni artistas que le cantaran, como es tradición, el cumpleaños a la ciudad a las doce de la noche; al momento de sonar el himno este presentó problemas técnicos que se pudieron evitar con antelación en una prueba técnica que no se hizo. Además de los retrasos y demoras que han tenido todos los eventos de Fiesta del Mar, que inician con dos o tres horas de haber sido programados.
El acceso a los eventos ha sido criticado por los samarios, puesto que se suponen son gratuitos, pero la persona para ingresar y tener un lugar cercano para observar los espectáculos debe adquirir boletas que no se sabe quién las entrega, dónde se consiguen, ni por qué las dan, simplemente aparecen de la nada y muchos samarios deben comprarlas cuando anuncian con bombos y platillos que todos los eventos son gratis.
El lunar
Nuevamente la prensa samaria recibe maltrato por parte de la organización y logística del evento, una vez los periodistas, camarógrafos y reporteros gráficos llegan a cubrir los diferentes actos se encuentran sin espacios adecuados para realizar de manera tranquila su labor, sin sillas donde sentarse, y ultrajados por parte de la logística, en el caso puntual del concierto de inauguración, muchos periodista prefirieron irse del lugar ante semejante trato indignante a los medios de comunicación porque no contaron con un lugar propicio para hacer su labor; se sigue viviendo lo mismo de todos los años.