Hola, amigos, esta semana les entrego unas muestras de lo difícil que es, para algunos, manejar bien un idioma tan bello y elegante como el castellano. El problema es que por los oficios que desempeñan propagan sus disparates a través de los medios, sin tener en cuenta que muchos jóvenes los escuchan o los leen, y así nuestra lengua se va deteriorando horriblemente.
Por ejemplo, el pasado jueves 10 de febrero, en el noticiario que pasan por el canal local Campo Televisión, el lector de los titulares nos dijo: "El bésibol del Magdalena se renova." Ese fue el titular leído, disparate lingüístico ya que "renovar" es un verbo irregular, por lo tanto el buen señor debió decir "se renueva", lo que de ser cierto sería una muy buena noticia. Pero todos sabemos que aquí, ni el Distrito, ni el Departamento, ni mucho menos la empresa privada se preocupan por el deporte, por lo que no creo que el rey del mismo se renueve.
A nivel nacional, en el noticiero de una de las cadenas pulpo que hay en el país, nos afirmaba el presentador, cuando entregaba la noticia de un conductor que fue agredido por uno de esos agentes de la Policía que se extralimitan, y golpeaba al detenido que ya estaba esposado: "El conductor fue agredido por el oficial sin que este se pudiera defender porque estaba esposado…" Error, mi apreciado presentador: si usted dice "este", se refiere al último que nombró, o sea, el oficial. Debió decir: "Sin que aquel se pudiera defender…" O mejor aún: "El oficial agredió a golpes al conductor sin que este…" (Ahora sí).
Y la reportera de Noticias RCN que cubría el movimiento realizado en Bogotá por los transportadores de carga, informaba el pasado martes 15: "Hay problemas de movilidad, no solo para los transeúntes, sino para los conductores de los vehículos…" Otro disparate que nace de no conocer el significado de la palabra "transeúnte". Pero no se lo voy a decir, los invito a consultar el diccionario para que vean que tanto los peatones como los conductores son tales. Es decir, los problemas eran para todos: los de a pie (peatones) y los conductores (quienes conducen sus vehículos), pero repito, tanto los unos como los otros son transeúntes.
También en las narraciones deportivas hubo sus gazapos. El narrador de uno de los juegos que vimos por televisión este sábado que pasó, nos decía en algún momento: "Hay un jugador en el suelo del Once Caldas…" Quizás es perdonable porque en lo oral se va improvisando, pero me parece que es mucho más fácil y más claro decir: "Hay un jugador del Once Caldas en el suelo", porque, entre otras cosas, el jugador se hallaba en terreno defendido por el equipo contrario, por lo tanto no queda ni la excusa de afirmar que "el suelo" era del equipo que ganó la confrontación.
Finalmente, quiero informarles que he recibido del doctor Alejandro Arias, abogado, un documento que le agradezco. En él me dice que ya ha impuesto sesenta y tres (63) denuncias contra el Alcalde distrital, en Bogotá, porque aquí, según su opinión, hay amiguismo y prevalece la impunidad. De todas maneras, no he tenido tiempo de leerlo completo por lo que les prometo un comentario para la próxima semana. No más por hoy, gracias mil por su atención y hasta el próximo sábado.
