Durante 63 años, este medio de comunicación se ha mantenido fiel a los ideales con los que fue fundado en 1958.
Político, empresario y líder samario, ‘Pepe’ Vives, como era conocido por familiares, allegados y la ciudadanía en general, desde 1935 tenía la idea de tener un medio de comunicación al servicio de Santa Marta y el departamento del Magdalena.
Ocupó distintos cargos públicos, entre esos fue alcalde de Santa Marta, secretario de Hacienda y Gobierno y también gobernador del Magdalena. Durante el periodo de gobierno del presidente Eduardo Santos, nombre que lleva el estadio tradicional de Santa Marta, se vivió una gran transformación de la ciudad. Obras como el acueducto, que luego de más de 60 años sigue vigente, la carretera Ciénaga-Santa Marta, la Escuela Francisco de Paula Santander, el Club Santa Marta, el antiguo Hospital San Juan de Dios, el Altar de la Patria y muchas otras, que significaron progreso, se deben a la excelsa gestión de ‘Pepe’ Vives.
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En su misión de dirigir un vocero de los intereses de su ciudad, arrendó el periódico El Estado en 1935, el cual dirigió hasta 1936. El primer periódico que fundó se llamó EL Liberal, en 1937. Este medio nació para defender los intereses de la comunidad de la provincia ante el Estado y los ideales liberales, pero por temas económicos en el contexto de una Santa Marta de menos de 50 mil habitantes y con muy poca actividad industrial y empresarial, no logró sostenerse.
Sería entonces en 1958 cuando el 7 de agosto fundó en Santa Marta el periódico EL INFORMADOR, en una fecha histórica, pues ese día se posesionó el primer presidente del Frente Nacional, Alberto Lleras Camargo, lo que marcaba el fin de una era de violencia. Fue ese el tema que abordó el primer editorial de este periódico, que, hasta el sol de hoy, es el más antiguo de la ciudad, llevando en sus páginas el borrador de la historia de Santa Marta y el Magdalena.
La primera sede del periódico
La primera sede de El Informador estuvo ubicada en el Centro Histórico, en la calle Burechito (21), con avenida Campo Serrano, en su primera edición su director y fundador José Benito Vives De Andréis presentó a la comunidad un periódico moderno, al servicio del departamento.
Paralelo al crecimiento de la ciudad, creció este medio de comunicación que en sus inicios fue un periódico y ahora es un diario de amplia circulación que se mantiene a la vanguardia.
Sede actual
Meses después del fallecimiento de don ‘Pepe’ Vives, sus familiares decidieron hacer de la residencia de su fundador, la sede del periódico. La casa fue remodelada; su fachada es moderna, pero conserva la estructura de la original. En su nombre, la Sala de Tertulias de este medio, en la cual se reciben los invitados y por la que han pasado presidentes, expresidentes, políticos, senadores y todo tipo de personajes importantes de Colombia, lleva el nombre ‘Pepe’ Vives De Andréis.
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Don ‘Pepe’ Vives De Andréis falleció el 29 de abril de 1984, pero su legado sigue vivo a través de las páginas de este medio de comunicación que se mantiene fiel a los ideales de su fundador, informando y defendiendo los intereses en favor de la ciudadanía samaria y del Magdalena. Sus obras, están a la vista de los ciudadanos. De ellas habla en el libro “Pepe Vives Cuenta su Vida en el capítulo que él mismo llamó “Obras son Amores”.
Desde la Presidencia de la República fue destacado don ‘Pepe’ Vives como un hombre que estaba a la altura de las mejores condecoraciones y cuyos esfuerzos como gobernador del Magdalena (1940-1942) fueron los de “una administración modelo que deja imborrables recuerdos de su eficacia y de su acierto”.
Samario merecedor de Orden de Boyacá
Gracias a la entrega y tesón de don ‘Pepe’ Vives en favor de su ciudad, fue el primer samario merecedor de la Orden de Boyacá, la más alta condecoración que otorga el Gobierno Nacional, creada por Simón Bolívar, entregada a militares destacados y civiles. Cabe resaltar que, cuarenta años después, fue otorgada en el grado de Gran Cruz al también samario Sergio Díaz-Granados Guida el pasado 31 de julio de 2021.
La Orden de Boyacá, es una distinción altamente honorífica para los ciudadanos del país, así como para los personajes de naciones amigas de Colombia, a quienes se les confiere en reconocimiento de méritos especiales. Ha sido otorgada a reyes, científicos, deportistas y otros personajes destacados.
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Pero don ‘Pepe’ Vives no fue elegido por el Gobierno, sino que fue nominado por un grupo de ciudadanos samarios que reconocieron en él, un líder ejemplar digno de enaltecer.
Así quedó consignado en las páginas del periódico El Estado en la edición del 10 de agosto de 1942, con el título “Don José B. Vives digno de la Cruz de Boyacá”, en una carta dirigida desde la Presidencia de la República a los ciudadanos Rodrigo Linero, Francisco Fuentes, Francisco Luis Olarte, Alonso González, Fernando Meléndez, Pedro Dávila, Gerardo M. Danies, Alfredo Bonitto H., Eduardo Castro A., Aquiles Miranda, Luis E. Ovalle, Andrés G. Ceballos, Luis M. Dz. Granados, Teodosio Goenaga, C. García, luan B. Freile, José Ig. Méndez, Horacio Manjarrés, demás amigos.
En ella se relata el recibimiento de telegramas solicitando para ‘Pepe’ Vives, la Cruz de Boyacá, en reconocimiento a la labor que ha realizado como gobernador del Magdalena. Esta carta señala que Vives De Andréis “está a la altura de las mejores condecoraciones” y que los esfuerzos del gobernador “son allá apreciados en su valor altísimo el triunfo de esa administración modelo que deja imborrables recuerdos de su eficacia y de su acierto”.
A pesar de esta respuesta, no le pudo ser concedida esta condecoración descrita como ‘ampliamente merecida’, como también quedó plasmado en una carta dirigida por Manuel Caamaño, abogado de Presidencia, en aquella época
Para la familia Vives, es muy posible que la razón de no otorgarle la distinción en ese entonces sería precisamente por el cargo que ocupaba.
Fue hasta el 21 de noviembre de 1980 cuando por medio de un decreto se le hizo el reconocimiento, que fue otorgado personalmente en el año 1981. Vino a Santa Marta el canciller de la época Diego Uribe Vargas, y debido al estado de salud de don ‘Pepe’, la ceremonia de entrega se realizó en la casa que hoy es sede de EL INFORMADOR.
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La distinción fue concedida en el grado de Comendador, la cual se otorga a enviados extraordinarios y ministros plenipotenciarios acreditados especialmente para la transmisión del mando, a ministros residentes, a encargados de negocios titulares, obispos, coroneles y tenientes coroneles, mayores, capitanes de navío, fragata o corbeta, así como a nacionales o extranjeros cuya categoría equivalga a las ya citadas.
El 7 de agosto de 1958 se posesionó el primer presidente del Frente Nacional, Alberto Lleras Camargo, tema que se abordó en el primer editorial de este medio de comunicación naciente.