Aulas improvisadas, salones que no cumplen las condiciones, sin bibliotecas o salas de informática y en medio del polvo, a ese cuadro se enfrentan desde hace años estudiantes de al menos cinco instituciones de Santa Marta debido a la demora en obras de refacción.
Los 1.700 alumnos de la IED Técnica Industrial ven clases en salones más reducidos a los que estaban acostumbrados. En salones improvisados o que no cumplen las condiciones, sin áreas para actividades pedagógicas complementarias y en algunos casos aspirando el polvo que generan las construcciones, así reciben clases los estudiantes de al menos cinco instituciones educativas de Santa Marta que se encuentran en un proceso de remodelación y que pareciera no tener fin.
Entre los alumnos que a diario deben enfrentarse a ese cuadro de incomodidades mientras leen, apuntan sus deberes o comparten con sus compañeros se encuentran los del Liceo Celedón, el Instituto Magdalena, la Técnica Industrial, el Inem Simón Bolívar y el colegio Rodrigo de Bastidas.
Desde uno y hasta tres años de espera tienen niños y jóvenes samarios, mientras los trabajos en los recintos se encuentran paralizados, retrasados, sin fecha de entrega, o en el peor de los casos aún sin iniciar.
Tres años de trabajo en el Celedón
Los trabajos de restauración del Liceo Celedón, declarado Monumento Nacional en 1993, que iniciaron hace tres años y que tenían que estar listos en diciembre pasado, se encuentran paralizados y sin fecha exacta de culminación.
“Nos habían dicho que la sede sería entregada a finales del año pasado, que era el plazo que el Distrito, a través de la Secretaría de Infraestructura, le había puesto a los contratistas. Sin embargo, han existido retrasos por responsabilidad del constructor, por lo que se prorrogó el contrato. Ahora la obra está congelada esperando respuesta de Electricaribe sobre unos diseños del sistema eléctrico”, comenta José Mario Granados, rector de la institución.
Mientras la restauración está paralizada, sea por responsabilidad del Distrito, los constructores o Electricaribe, los alumnos ven clases en la Casa Rectoral, la biblioteca o comedor escolar, donde se han dispuesto pupitres, tableros y ventiladores. “Hemos acondicionado esos espacios tratando de hacer que su permanencia allí sea lo más digna posible”, agrega el directivo docente.
Aunque el tema no es nuevo, las incomodidades se han agudizado. “Este año la situación es un poco más compleja que el anterior. En 2016 tuvimos una población de 348 estudiantes y este año aumentó a 510. El crecimiento nos llevó a tomar unas medidas de contingencia, habilitar más áreas de la institución para poder atender a más estudiantes”. Las alumnas del Instituto Magdalena reciben todo el polvo que se desprende de la construcción.
Ver Más:
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
16
Sin iniciar obras en la Industrial
En julio de 2014 el deterioro de la IED Técnica Industrial, otro de los monumentos nacionales con los que cuenta Santa Marta desde 1993, llevó a la Alcaldía a ordenar la evacuación del lugar para iniciar un proceso de restauración.
Casi tres años después de que los 1.700 alumnos fueron reub
icados hacia una sede más pequeña, ubicada en El Cundí, los trabajos de remodelación ni siquiera comienzan. Y los niños y jóvenes siguen escuchando clases en áreas mucho menos cómodas.
Meredith Zamora Salcedo, rectora de la institución, comenta que la reubicación de estudiantes ante el proceso de mejora de la sede principal ha sido un proceso dispendioso, largo y difícil de manejar.
“Cuando nos trasladamos no teníamos las mejores condiciones, sin baterías sanitarias o ventilación, por lo que tuvimos que adecuar las áreas que íbamos a ocupar. Mejoramos los espacios, logramos acomodarnos, pero estos son mucho más reducidos acá”.
Aunque de a poco, con gestiones de toda la comunidad educativa lograron acomodarse en las áreas seleccionadas, Zamora asegura que requieren que se acelere el inicio de las remodelaciones.
“La dificultad que tenemos es que la sede principal aún pertenece al Departamento. Eso ha causado un impasse, porque la Gobernación no ha cedido el bien a la Alcaldía, por eso el Distrito no puede disponer de los recursos. En el último encuentro nos dijeron que la Gobernación le dejó la responsabilidad de la cesión del bien a la Asamblea departamental, la cual hace un estudio del caso. Por eso cinco mil millones de pesos están estancados desde hace tres años”.
Ver Más:
1
2
3
4
5
6
7
Paralizadas obras en el IED Magdalena
En el caso del IED Magdalena, cuya remodelación tiene casi dos años y tenía que estar lista en 2016, las 1.300 niñas matriculadas aún tienen unos salones donde escuchar sus clases, pero los mismos se encuentran justo al lado de la obra, por lo que reciben todo el polvo que se desprende de una construcción.
Eleazar Álvarez, rector de la escuela, indica que en la institución se aplicó un plan de contingencia para atender a la población estudiantil, pero el inconveniente radica en que se quedaron sin espacios para las actividades de soporte pedagógico, como biblioteca, salas de informática, laboratorios y área de idiomas.
“Los plazos están vencidos ya. La remodelación inició desde abril de 2015. El alcalde –Rafael Martínez- nos ha manifestado que se está tratando para destrabar el proceso y que dentro de poco se reiniciarían las obras”. La maleza se traga las obras en el colegio Rodrigo de Bastidas, que tienen dos años de retraso.
Ver Más:
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
“Toda obra genera incomodidad”
William Renán, secretario de Educación distrital, reconoce las implicaciones que tienen las obras en las escuelas en la comunidad estudiantil. “Toda obra genera incomodidades, mas si las remodelaciones se hacen en el mismo lugar donde se presta un servicio. Ese es el costo de intervenir. Pedimos paciencia porque por lo menos estas administraciones dispusieron de los recursos para resolver”.
Menciona que uno de los casos se presenta en el Inem Simón Bolívar de Mamatoco, cuyas obras de mejora aún no se inician tras la caída del techo del instituto. El funcionario afirma que el Distrito asignó una contrapartida de 17 mil millones de pesos, sin embargo, la ejecución le corresponde al Ministerio de Educación, que es el que tiene que iniciar las obras y asegura que eso será a mediados de año.
Eleazar Álvarez, rector del Instituto Magdalena.
Meredith Zamora, rectora de la IED Técnico Industrial.
José Mario Granados, rector del Liceo Celedón.
También aclara que en el colegio Rodrigo de Bastidas, dónde los trabajos presentan un retraso de dos años, la Alcaldía realiza un proceso sancionatorio contra la contratista encargada, para luego asignar la culminación del 20 por ciento que le falta a la obra a otra empresa. Mientras tanto los pequeños ven clases en espacios alquilados pagados por el Distrito.
“Esta es una administración comprometida a intervenir la infraestructura. Ahora que se está haciendo no se puede poner problema por las afectaciones que implica. Peor es no hacer nada”, sostiene, aunque admite que las remodelaciones sobrepasan los tiempos prometidos.
Daniela A. García Gómez Redacción EL INFORMADOR Fotos por: Orlando Marchena Ternera
Antolín Arias en medio de tantas derrotas, ganó en el año 1971 cuando en el Festival de la Leyenda Vallenata abrieron la categoría de Adolescentes, derrotando a Rafael Salas y Enrique Murgas, segundo y tercer puesto, respectivamente.
Titular de EL INFORMADOR, de su edición del 5 de abril de 1974 anunciando la histórica inauguración del Puente ‘Laureano Gómez’, que unía a, departamento de Magdalena con el Atlántico, prevista para el día siguiente.
La obra mas importante de Gabriela Mistral, fue 'Desolación', el poemario que sembró sus pilares literarios. La Nueva York de 1922 fue la primera en leerlo. En la imagen fotografía de una estatua de Gabriela Mistral en la localidad de Montegrande, Chile. (Fotos EFE/Iñaki Martinez)
