Según el Instituto Nacional de Salud, reportó que en abril de este año hubo cuatro casos de VIH en Santa Marta y uno en el Magdalena, cuatro de ellos procedentes de Venezuela.
Debido a la crisis que afronta actualmente Venezuela, ciudadanos se dirigen hacia diferentes regiones de Colombia en búsqueda de mejores oportunidades, por lo que ha generado que el país tome medidas debido al elevado número de mujeres embarazadas de esta nacionalidad y también enfermedades virales.
La infección por Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH), es la causante del Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida, Sida. Dicho síndrome, es el causante de una serie de enfermedades, las cuales finalmente desencadenan en la muerte.
La infección por VIH se ha convertido en una pandemia a nivel mundial de la cual Colombia no es ajena, aunque en el 2018 arrancó con muy buenas noticias respecto a la lucha contra este virus y las opciones de tratamiento para los pacientes en Colombia, que, según las cifras más recientes, se estima que son cerca de 74.000 en todo el país.
Según el Instituto Nacional de Salud, en el Magdalena se han detectado 153 casos y en el Distrito Turístico de Santa Marta con 118 reportados hasta el mes de septiembre. Es de destacar que en el primer semestre del año, el INS identificó que cinco casos eran de procedencia venezolana, cuatro en la capital y uno el departamento.
Por su parte, el Secretario de Salud distrital Julio Salas, indico, “los casos de VIH en la ciudad de Santa Marta no han presentado todavía cifras de alarma, la situación que se está proyectando es de tomar medidas preventivas por el éxodo masivo de migrantes, que puedan tener el diagnostico de esta enfermedad, en ese sentido se han intensificado las acciones de prevención, a través de programas de salud sexual y reproductiva y la importancia del uso de preservativos, la realización de pruebas rápidas a migrantes y en comunidades”.
Ante esta situación los entes encargados de la salud hacen el llamado a utilizar mecanismos de prevención para evitar las enfermedades de transmisión sexual y en adoptar una vida sexual responsable, pues no hay ninguna vacuna que pueda prevenirlo.
