Una gran confusión existe entre las personas que habitualmente transitan en la vía que de Santa Marta conduce a Ciénaga, tanto en la Troncal del Caribe como en la recién inaugurada Vía Alterna al Puerto, y todo por la circulación de los vehículos, sobre todo los de transporte pesado.
La preocupación o molestia radica en la construcción del puente que une las dos vías, cuando se transita en sentido Mamatoco-Barranquilla, aducen ciudadanos preocupados que es inaudito, o al menos inexplicable, que ese puente tenga "orejas" por donde transitarán los automotores más grandes, es decir tractomulas, camiones y buses interdepartamentales, tengan en determinado momento que regresar para después tomar la vía nuevamente rumbo a Ciénaga o Barranquilla.
Un grupo de esos ciudadanos confundidos y molestos, llegaron hasta las instalaciones de la Concesión Ruta del Sol II y expusieron lo que a su modo de ver era un error, pues eso retrasaría la circulación hacia Ciénaga y Barranquilla, vía que es la que soporta el mayor flujo vehicular; además originaría muchos trancones y hasta posibles colisiones, pues en determinado momento el tráfico pesado se encontraría con el tráfico vehicular normal.
Un fotógrafo de EL INFORMADOR estuvo en dicho trayecto y constató que varios tractomulas procedentes de Santa Marta, por la vía Alterna tomaron las "orejas" en cuestión y retrocedieron para luego meterse en la Troncal, taponando en su totalidad la carretera.
Al parecer tal decisión de conducir por esas "orejas" la toman como forma de evasión del trancón que se genera en la unión de la Vía Alterna con la Troncal del Caribe, sitio donde se encuentra una glorieta momentánea, que impide un flujo normal de los vehículos.
Ojalá que no sea una falla técnica
Las obras que se realizan en la vía Santa Marta-Ciénaga, como parte del mega proyecto Ruta del Sol, sin duda constituye en la propuesta en desarrollo vial que ha tenido el departamento del Magdalena en las últimas décadas, jalonando con ello desarrollo comercial y mejores condiciones de vida para la región.
Quienes consideran que las fallas que se observan en la manera de como circulan los automotores por el puente, son evidentes, se sienten verdaderamente alarmados en vista que tal inversión, multimillonaria por cierto, estaría a punto de tener un error garrafal, convirtiéndose en un punto negro que los samarios y magdalenenses estarían en riesgo de correr, y que probablemente, de no tomarse los correctivos del caso, ocasionaría en un futuro no muy lejano graves accidentes.
La ciudad y el departamento no están acostumbrados a obras de tal magnitud, por ello existe una permanente vigilancia de la comunidad, con el fin que proyectos como estos no fracasen, como muchos otros que no prosperaron durante décadas.
Responde la empresa encargada
La Concesión Ruta del Sol atendió las inquietudes y quedó en analizar el proyecto, especialmente el caso del puente, además informó que si había que hacer alguna corrección se haría, pero hasta el momento no se ha conocido ninguna respuesta al respecto.