La Constitución Política establece que la familia es el núcleo fundamental de la sociedad, que las relaciones familiares se basan en la igualdad de derechos y deberes entre los miembros de la pareja y en el respeto recíproco entre sus integrantes, y señala que cualquier forma de violencia en la familia se considera destructiva de su armonía y unidad (Art.42C.Po) de acuerdo a este derecho, no es menos cierto, que la reivindicación de los derechos de la mujer, especialmente de su derecho a la igualdad y a la no discriminación, ha incidido ostensiblemente en el cambio de ciertas cosmovisiones del mundo, fundadas y equivocadas en patrones patriarcales.