Durante el periodo anterior, la filial del grupo EPM en la costa Caribe se convirtió en un bastión político. La situación financiera es una preocupación para la Administración Distrital.
El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, señaló la posible existencia de negociaciones poco transparentes que habrían ocurrido dentro de Afinia, la subsidiaria de EPM en la costa Caribe, durante el periodo anterior de cuatro años.
Esta situación fue revelada a Gutiérrez en el contexto de una auditoría forense en curso dentro del Distrito, cuyos primeros hallazgos importantes se presentaron a principios de marzo.
Aunque el informe inicial mencionaba principalmente casos relacionados con programas emblemáticos como Computadores Futuro, escándalos como el lote de Aguas Vivas y supuestas irregularidades en el manejo del Presupuesto Participativo, entre otros, se conocía poco sobre entidades como EPM, que ha estado abordando desafíos en su filial Afinia durante más de tres años.
Según informes, estas negociaciones irregulares involucraron a un excongresista cuestionado de Bello, intermediarios de nacionalidad venezolana y empresarios vinculados a otros escándalos nacionales.
El caso ha llegado a ser objeto de una investigación criminal en la Fiscalía, y en el expediente se encuentra una declaración de un testigo que denunció amenazas y solicitó protección.
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Según Gutiérrez, basándose en las declaraciones del testigo, esta negociación tuvo lugar en un restaurante en el suroriente de Medellín, donde al parecer se cedió control político en la filial a cambio de un pago de 8 millones de dólares.
Según se ha informado, estas conversaciones también habrían tenido lugar en clubes tanto en Medellín como en Barranquilla, con la participación de un empresario implicado en el escándalo del carrusel de la contratación en Bogotá durante la alcaldía de Samuel Moreno.
El alcalde mencionó que el testimonio incluye detalles sobre cómo se pactó el negocio, los porcentajes involucrados y las presuntas coimas recibidas.
Gutiérrez denunció: “Jugaron con EPM, jugaron con el patrimonio público”, enfatizó.
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Cifras preocupan
Además de este caso, es importante recordar que desde finales del año pasado el alcalde Federico Gutiérrez expresó públicamente su preocupación por la situación financiera en la que recibió Afinia. Desde el edificio inteligente de EPM, se considera este tema crítico debido a los rezagos en sus indicadores y al alto flujo de recursos que podría comprometer a la casa matriz en Medellín.
Se estima que este año la compañía requerirá una inversión que podría superar los $1,5 billones, mientras que mensualmente se calcula que está perdiendo al menos $80.000 millones.
