Por Roger Urieles Redactor de EL INFORMADOR Fotos: CortesiaVanguardia
Unión Magdalena bajó del cielo al infierno en el partido disputado en Bucaramanga, donde por varios minutos tuvo la victoria por la mínima diferencia, pero al final no pudo mantenerla y terminó neutralizado por Real Santander que hizo respetar su casa y sumó los tres puntos, tras ganar tres goles por uno.
Los samarios en la primera mitad fueron los grandes protagonistas del encuentro, sin embargo, no supieron aprovechar su momento y la pasividad inicial de los santandereanos, pasando en el complemento de ser los dominadores a los dominados.
Nuevamente el conjunto bananero propuso fútbol y arriesgó de visitante en busca de un marcador positivo, objetivo que parecía conseguir por el número de llegadas repetitivas que provocó sobre territorio enemigo.
Real Santander lució inicialmente sin ideas y manera de contener el ataque visitante, por lo que se preocupó más por proteger su feudo y originar las oportunidades a través del contragolpe.
El medio campo unionista funcionó bien los primeros 45 minutos, juntándose Didier Roa, Luis Mosquera y Armando Vargas, quienes por el sector derecho rompieron en más de una ocasión el muro santandereano, obligando a exigirse al portero Blademir Gómez. Fueron alrededor de seis opciones de gol la que tuvieron en sus pies los bananeros, no obstante jugadores como Erwin Carrillo y Juan Manuel Quevedo fallaron en la definición y le dieron chance a los albos de reaccionar y hacerse sentir en el estadio Alfonso López.
La insistencia de los dirigidos por Carlos Silva, hizo caer en el desespero a los locales, quienes en un intento de prevenir un tiro al arco, tocaron el balón con la mano, originando una pena máxima bien ejecutada por Quevedo que significó el primer gol samario al minuto 42.
Los últimos instantes de la primera mitad, continuaron siendo de la visita que permaneció en territorio del Real Santander, situación que dio un giro completo en la segunda parte, cuando las acciones cambiaron de protagonistas.
Los santandereanos recordaron la obligación que tenían de ganar en su feudo y despertaron del letargo que permanecieron durante la etapa inicial, siendo en el resto del partido los que plantearon las condiciones y argumentos en el terreno de juego.
Unión Magdalena por su parte bajó la revolución en su ataque, ante el ímpetu mostrado por el rival que subió sus líneas y empezó hacerse sentirse por todos lados, para conseguir la igualdad.
El equipo de Santa Marta no pudo controlar mucho tiempo esa presión y cayó de nuevo en errores defensivo que a la postre, le permitieron a los albos en escasos seis minutos poner el marcador empatado a un gol por medio de la definición de Luis Ferney Ríos, quien se convertiría en la pesadilla de la saga unionista, cada vez que comandara el ataque.
La anotación en contra apagó aún más el juego de los samarios, que únicamente se dedicaron de aguantar la arremetida santandereana que cada vez era más fuerte y con mayor peligro.
Real Santander siguió destapando las falencias de la defensa del Unión y en otra desatención le marcó el segundo gol al minuto 14, una vez más obra de Luis Ferney Ríos que cerraría su magnífica presentación con una tercera diana al minuto 22.
El resto del encuentro mantuvo a Santander como único dominador, contrarrestando totalmente el funcionamiento de los bananeros, que ya solo esperaban que el juez central le pusiera fin a otro partido para el olvido.
Con la nueva derrota, Unión Magdalena se ubica en la novena posición con las mismas 22 unidades mientras que Real Santander subió a la sexta posición con 24 puntos.