Guamal vivió su primer Festival del Perillero Sentao y Porro Tapao

Cultural
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El evento tuvo gran acogida, los guamaleros asistieron de manera masiva. Asimismo, fue transmitido de manera virtual y contó con espectadores a nivel internacional.

En Guamal, Magdalena, se llevó a cabo con total éxito la primera edición del Festival del Perillero sentao y Porro Tapao, en homenaje al maestro Aurelio "Yeyo" Fernández Guerrero, cañamillero ancestral vinculado a las ruedas de cumbia del municipio desde 1.968, custodio y autor de obras que hacen parte de nuestro patrimonio cultural inmaterial, tales como El perillero, el Son de farotas, El millo se modernizó y Mañanitas de diciembre.

El evento realizado el 28 de diciembre fue aperturado, pasadas las siete de la noche, por el burgomaestre Osmer Díaz, haciendo una pequeña semblanza del homenajeado, felicitando a los organizadores, pidiendo a los concurrentes conservar la mejor de las actitudes, observando las medidas de bioseguridad, augurando lo mejor para esta edición y una larga vida para el evento que, desde su administración respaldaron irrestrictamente.

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En el evento se presentó el grupo folclórico Aurelio Fernández, de El botón de Leyva, ejecutando un Perillero y un Berroche en honor al maestro homenajeado; fue interpretada la canción Mi tierra colorá por la joven Scarlett Arnache. Una canción en la que el compositor Artemio “Geño” Salas habla de la nostalgia que le produce al guamalero pasar la temporada de fin de año lejos de su tierra, nombra a varios personajes y las bondades del pueblo, que amañan a los forasteros e invita a bailar y gozar la cumbia a pata pelá, como anteriormente se hacía.



Concursos

Se realizaron concursos de baile en parejas, juveniles y mayores, y de cañamilleros, en los cuales se premiaron los siguientes participantes:

Baile en parejas, categoría juvenil: Carmen Díaz y Santiago Mora, primer puesto; Wendy Arrieta y Joel Arrieta, segundo puesto y Saray Duque y Anderson Hoyos, tercer puesto.

Baile en parejas, categoría mayor: Robin Blanco y Helen Blanco (padre e hija), primer puesto; Rosiris Orozco y José Ignacio Olivares, segundo puesto y Yasmit Orozco y Juan Gómez, tercer puesto.

Cañamilleros: Andrés Felipe Luna y Edwin Durán López, primer y segundo puesto, respectivamente.



Historia

El detonante para la realización del Festival, de acuerdo a sus organizadores, fue haber identificado en los talleres de formulación del Plan Especial de Salvaguardia de la Cumbia, que esta sólo era entendida como ritmo y como baile, pero no como práctica social, como el espacio de encuentro igualitario que es para los guamaleros, donde se interpreta todo un conjunto de géneros que constituyen el repertorio tradicional de los grupos de flauta de millo típicos de la Depresión momposina. Entendieron, entonces, que era necesario dar a conocer la forma en la que en su pueblo se vive esta tradición, cuyas particularidades pasan por la puesta en escena, que está conformada por una mata de plátano en torno a la cual se construye un corral de madera, que sirve para resguardar a los músicos y poner límite entre su espacio interpretativo y el espacio circundante. Las parejas bailan en torno a este corral y esta mata de plátano y son separadas del resto de la plaza por un cordón de espectadores, de entre los cuales ocasionalmente entran o salen otros bailadores.

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Aunque el homenajeado no pudo asistir, por problemas de salud, le fue entregado el reconocimiento en su casa, horas previas al evento, por parte de los organizadores “Por su invaluable aporte a la cultura musical del caribe colombiano, su amplia trayectoria como cañamillero, custodia de los ritmos tradicionales y la formación de los nuevos intérpretes de la región”, según reza el diploma que le fue otorgado.



Los organizadores, la Fundación para el desarrollo integral de Guamal, Robert Ramírez Blanco y el Grupo folclórico Son y sabor del río, han quedado muy satisfechos con la acogida del evento, los buenos comentarios generados, la masiva asistencia y el seguimiento realizado por redes, incluso desde fuera del país, lo cual les motiva y compromete a seguir trabajando para lograr que las próximas ediciones del festival sean aún mejores que esta inaugural.